The Boy Who Blew The Whistle
Menú principal

Eventos y clases


Hazte Miembro

Encuentra más sabiduría y ejercicios para elevarte, elevar tu vida y la de aquellos que te rodean. Desde artículos y videos semanales a clases trasmitidas en vivo, clases presenciales y eventos. Hay un plan de membresía para cada persona.

Ver planes de membresía
Membresía sugerida:

Onehouse Community Premium

  • Sus beneficios incluyen:
  • Únete a webinarios interactivos cada semana
  • Ve cursos completos bajo demanda
  • Disfruta descuentos en eventos, sesiones de orientación y productos*
  • Y mucho más...
  • Inscríbete hoy
  • *En las sedes participantes. Hay restricciones.

Profundiza aún más en la sabiduría de la Kabbalah con una guía personalizada y lectura de carta astral.

Consulta gratuita

Nuestro equipo dedicado está aquí para ayudarte a transitar tu viaje espiritual.

Solicita la tuya

Lectura astrológica kabbalística

Aprender acerca de nuestra alma a través de una carta astral ayuda a dar más significado y un mayor entendimiento a las experiencias que enfrentamos, las personas que conocemos, el trabajo que hacemos y las bifurcaciones en el camino.

Solicita la lectura de tu carta

Guía personal - Servicios del Centro de Kabbalah

Sesiones personalizadas individuales con un instructor para profundizar en el área que te interesa o apoyarte donde más lo necesitas. Las reuniones abarcan temas desde las relaciones hasta el tikún o un estudio profundo del Zóhar, todas personalizadas especialmente para ti.

Reserva una sesión de guía

The Boy Who Blew The Whistle

Karen Berg
Abril 22, 2015
Me gusta Comentarios Compartir

There is a story about a simple shepherd boy who did not know how to pray. He was sad because he did not know how to reach the Gates of Heaven. Nevertheless, he desired so strongly to know and be close to the Creator that he stood outside the house of prayer, took his whistle, and blew it with all his heart.

Meanwhile, inside the house of prayer was a group of people who knew all the prayers but who also could not open the Gates of Heaven. When they heard the boy blowing his whistle outside, they called out, "Stop it!” and then muttered to themselves, “How can he do such a thing? Here we are in prayer and meditation, and he is blowing a whistle."

The great kabbalist the Baal Shem Tov was in there among the people and he said, "Wait, stop yelling at him. The gates are open. The boy has opened up the Gates of Heaven with the sincerity of his heart!"

Most of us probably do not know all the words of all the prayers, and we may not be the most knowledgeable in spiritual matters. But really, it doesn’t matter because when our heart is pure and when we sing and pray in gratitude and love for being alive, we all are that boy with the whistle.


Comentarios