Rav Berg habla sobre un poderoso concepto en la porción de Vayikrá de la Torá. Toda la porción habla sobre los rituales de los sacrificios que los israelitas realizaban hace miles de años. Simplemente debemos entender que todos vinimos a este mundo con una corrección por hacer. Cuando observas a los demás, ¿por qué las cosas parecen injustas? ¿Por qué que algunas personas o estudiantes pasan por un proceso mientras que otros pasan por un proceso distinto? Pareciera que a veces tienes que pasar por MUCHO más dolor que ese de allá, y eso no te parece justo.
Los tipos de transformación especiales por los que todos debemos pasar se relacionan con todos los tipos especiales de sacrificios leídos en voz alta en la porción de la Torá.
Cada sacrificio representa un tipo distinto de transformación por el que debemos pasar.
Cada uno de nosotros pasa por un proceso UNICO. En consecuencia, debemos entender que la cantidad de dolor que sufrimos, la restricción que debemos realizar y las transformaciones que necesitamos hacer son lo que cada alma en particular necesita para ser completamente feliz en esta vida.
Rav Berg dice que nunca deberíamos ver el proceso de una persona y sentirnos mal (o bien) por nuestro propio proceso. Debemos luchar para agradecer y entender que el Creador nos ama a todos y nos da el DOLOR PRECISO Y ESPECIAL que necesitamos sufrir para ser la mejor versión de nosotros mismos. En conclusión, cada día debemos decirnos, “Doy gracias por mi vida, doy gracias por mi proceso y tengo certeza en la Luz del Creador”.