Estamos en el sexto día del mes de Nisán, o Aries. Según la astrología kabbalística, Nisán marca el inicio de los meses masculinos y es el primer signo del Zodíaco. Cada uno de los primeros doce días de Nisán representan la semilla de un mes completo. En este período, somos puestos a prueba para ver si podemos ejercer restricción y superar los desafíos asociados con el signo que corresponde a cada día. Esta práctica nos ayuda a establecer el tono para el resto del año y nos permite tener control sobre los varios aspectos de nuestra vida.
Aries nos ofrece valiosas herramientas para superar estas pruebas. Es conocido como el guerrero del Zodíaco y nos ayuda a enfrentarnos no solo a enemigos externos, sino también a nuestro propio ego. Aries representa la energía del ego en su forma más prominente, pero esta cualidad también trae consigo un fuerte deseo que puede ser dirigido hacia la búsqueda genuina de la Luz del Creador. A través de la fuerza de voluntad y la disposición para ir más allá de lo ordinario –características inherentes a Aries– podemos avanzar en nuestro desarrollo espiritual.
“Aries es conocido como el guerrero del Zodíaco…”
Esta semana, nos encontramos con una concentración significativa de energía en el signo de Aries: el Sol, Mercurio y Venus. El Sol representa nuestra vitalidad y propósito, Mercurio rige nuestras comunicaciones y pensamientos, y Venus influye en nuestros valores y relaciones. Esta alineación planetaria enfatiza la importancia de trabajar con las cualidades y desafíos asociados con Aries –el liderazgo y la determinación, por un lado, y la impaciencia y competitividad por otro– para aprovechar al máximo las oportunidades que nos ofrece este mes.
Como mencionamos la semana pasada, Mercurio se encuentra retrógrado en Aries del 2 al 25 de abril. Esto añade una capa adicional de desafíos y oportunidades. Es un buen momento para hacer una reflexión profunda además de ejercer mucha paciencia y claridad en la comunicación. Considera que se puede dar una comunicación conflictiva que lleva a malentendidos. Podemos tomar decisiones apresuradas, sentir una falta de claridad mental y tener retrasos y contratiempos en general. Es esencial ser conscientes de estos aspectos para enfrentar los desafíos de manera efectiva y aprovechar las oportunidades de aprendizaje durante esta fase retrógrada de Mercurio en Aries.
El cambio del Sol de Aries a Tauro el día 19 de abril marca un cambio significativo en la energía de la semana. Este movimiento representa una transición de una energía agresiva y enérgica a una más estable, serena y centrada en el placer terrenal. Estas características de Tauro influirán en nuestras acciones y enfoques durante este período. Sin embargo, también debemos estar conscientes de los desafíos asociados con Tauro, como la terquedad y la tendencia al apego material.
El Sol se encontrará con Júpiter y Urano en Tauro. Esta configuración planetaria nos invita a aprovechar las oportunidades de expansión y crecimiento, explorar nuevas formas de alcanzar nuestras metas y encontrar un equilibrio entre la estabilidad y la innovación en nuestras vidas. Es un momento propicio para reflexionar sobre nuestros valores, relaciones y la forma en que manejamos nuestros recursos materiales.
“Habrá un cambio de energía desde una fase inicial activa y enérgica hacia una fase más enfocada en las emociones y la introspección”.
En contraste con la concentración de energía en signos de fuego y tierra, tenemos a Marte, Neptuno y Saturno en Piscis, un signo de agua que representa la sensibilidad emocional y la espiritualidad. La carencia de planetas en aire indica una falta de influencia en temas de comunicación e intelectualidad durante este período. Esta distribución sugiere un cambio de energía desde una fase inicial activa y enérgica hacia una fase más enfocada en las emociones y la introspección. Es esencial considerar estas influencias al interpretar cómo experimentamos y respondemos a las energías planetarias esta semana.