Todos tenemos sueños o experiencias que nos ofrecen mensajes importantes. Es importante estar abiertos, no solo para recibir estos mensajes, sino también para actuar en consecuencia. La clave es escuchar de verdad sin miedo. Rav Najman de Breslov dijo: “El mundo entero es un puente estrecho, y lo más importante es no tener miedo de cruzarlo”.
Ékev comienza con el versículo: “Y sucederá porque escuchaste…”. Todos tenemos desacuerdos con otras personas. La mayoría de las veces, no oímos el punto de vista del otro porque no queremos escuchar. Creemos que ya conocemos todos los hechos y, la mayoría de las veces, creemos que tenemos razón. El capítulo de Ékev comienza considerando lo que sucede cuando nos mantenemos en nuestro trabajo espiritual y lo que sucede cuando no lo hacemos. En nuestro corazón, sabemos cuándo vamos por el camino equivocado. El problema es que o tenemos miedo de este conocimiento o no queremos hacer el trabajo necesario de corrección. Estamos aquí para completar nuestro karma. Algunos necesitan ayudar a un alma en particular. Otros regresan para ayudar a grupos de almas. En cualquier caso, hay alguna acción o secuencia de acciones en particular que debe completarse (o corregirse).
La Luna Llena ocurrirá cuando el Sol esté en Leo a 27 grados y 15 minutos, formando una oposición a la Luna en Acuario a 27 grados y 15 minutos. La Luna Llena es un momento de culminación y promete la manifestación de lo que se inició en la Luna Nueva. Es un momento emotivo, un tiempo de romance, fertilidad y relaciones más profundas.
El Sol en Leo es orgulloso e intensamente independiente, no está satisfecho con ser simplemente uno más del equipo. La Luna de Acuario, aunque también es individualista, valora el espíritu de equipo, comunidad y grupo. La Luna Llena arroja luz a este conflicto. Cuando ocurre una Luna Llena, de pronto podemos estallar con declaraciones y desbordes que parecen frescos y nuevos simplemente porque todavía no están racionalizados. De hecho, una Luna Llena arroja luz a sentimientos, actitudes y circunstancias que ya existen. Este es un tiempo para despertar en nosotros la necesidad de los demás o para responder a impulsos humanitarios.
Esta lunación está en cuadratura con Urano, lo que sugiere una energía tensa y rebelde conectada con nuestras revelaciones y epifanías. El Sol está alineado con Mercurio retrógrado, habiendo formado una conjunción inferior el día anterior, y nuestras revelaciones son cruciales y sorprendentes. Si bien estamos ansiosos por avanzar, nos estamos enfocando temporalmente en el pasado. Es momento de despertar la compasión y encontrar formas de ayudar a los necesitados al escuchar y actuar en consecuencia.