Esta semana es una de esas que pueden ayudarnos potencialmente a despertar la fuerza del amor, la empatía y la compasión en nuestra vida y para todo el mundo. Estamos en pleno mes de Virgo. Los virgo son conocidos por su gran capacidad para ofrecer atención y servicio a los demás. Son conocidos por su aptitud para el trabajo duro, concluir tareas y resolver problemas. Todos recibimos este don durante este mes, pero también debemos estar atentos a la dificultad potencial de ser muy prácticos.
El desafío es conectarnos emocionalmente y sentir con el corazón, en lugar de solo confiar en lo que sabemos intelectualmente que es lo correcto. Esta semana ofrece varias oportunidades para despertar el corazón: despertar más amor y empatía en todo lo que hacemos.
El 30 de agosto hay dos fuertes enfrentamientos u oposiciones. Una oposición es entre Mercurio y Neptuno, y la otra es entre Venus y Plutón. Estas oposiciones resaltan el desafío de estar más conectados emocionalmente y ser más intuitivos en nuestras tareas cotidianas y las interacciones con otras personas. Pero si trabajamos en sintonizarnos con esta oportunidad cósmica, podremos conectarnos con el poder de Venus en Cáncer y Neptuno en Piscis y permitir que nuestra intuición nos guíe (no solo nuestra mente).
El 2 de septiembre la Luna entra en su fase llena, la cual estará en Piscis. La luna llena es la otra oposición —esta vez entre el Sol y la Luna— obligándonos a encontrar el equilibrio entre el 1 % y el 99 % de la realidad. Otra forma en la que podemos considerarlo es como una oposición entre el enfoque familiar conocido y el enfoque más abierto, espontáneo y fluido. Es un día para mantenerse atentos a las tareas, pero estemos abiertos y pidámosle al Creado orientación en abrir el corazón y la mente espiritual a fin de recorrer el camino que la Luz sabe que es el mejor para nosotros.
Hacia los últimos tres días de la semana, Venus en Cáncer y Mercurio en Virgo estarán formando otro poderoso trígono (aspecto positivo). Recibiremos un impulso fuerte del universo para fortalecer nuestras relaciones y mejorar nuestra comunicación con nuestra pareja. El cosmos permitirá un mayor flujo de energía positiva para despertar el amor, la ternura y la compasión en el mes de Virgo, en el que la lógica y la practicidad nos lleva vehementemente en la dirección contraria.