La semana pasada, el Sol entró en el signo de Capricornio, amplificando su energía. Este mes de Tevet, como es llamado en hebreo, es un tiempo de seriedad y prudencia, en el que reinan la responsabilidad, el deber y el compromiso. Tenemos la capacidad de trabajar, planificar, estructurar y especificar nuestros objetivos. Es un período en que se favorece la toma de decisiones y estamos dispuestos a hacer un esfuerzo para lograr el éxito.
Este es el mejor mes para manifestar y consolidar. Sin embargo, en este mes las emociones son hechas a un lado y reprimidas. Puede que nos cueste ser cálidos, amorosos y clementes. Desde la perspectiva kabbalística, Capricornio es regido por Saturno, el planeta más alejado del Sol. El astro de los anillos es el último visible a simple vista (puede verse sin un telescopio). Su distancia del Sol indica su frialdad, que se manifiesta en las características del signo. Asimismo, Saturno es el planeta que delimita el sistema solar según la Kabbalah. Es por ello que se conoce como el astro que restringe y cercena. Y así es como Capricornio se manifiesta: frío y limitante, rígido y estructurado. La tarea para todos nosotros en este mes es inyectar amor, compasión, suavidad y flexibilidad en nuestra vida.
En cuanto a las fases lunares, desde el domingo, 26 de diciembre, hasta el 2 de enero, la Luna estará en el cuarto menguante; un tiempo para cierres. Tiempo para concluir lo que comenzó en la Luna Nueva. También es un buen momento para reflexionar, aprender y llevar cuenta de lo ocurrido. Esta fase lunar nos invita a eliminar, limpiar, purificar y soltar aquello que no nos es útil. Estas acciones nos permitirán hacer el espacio necesario para recibir la Luna Nueva de Acuario el 2 de enero. Usemos estos días sabiamente.
Durante esta fase, nuestro poder de análisis y reflexión es muy buena, no solo para deshacernos de aquello que no nos es útil sino también para planear y preparar nuevos comienzos. La semilla que siembres en la Luna Nueva tiene que ver con el mes que está empezando, en este caso es Acuario. Así que observa qué áreas de tu vida necesitan más libertad. ¿Dónde necesitas revolucionar, revelarte o cambiar? Identifica en qué área de tu vida debes buscar igualdad, en qué área de tu vida necesita progresar, innovar y mirar al futuro. ¿Dónde necesitas soltar ataduras? Shevat es el mejor mes para llevar a cabo estas acciones.
Debido a la energía del último cuarto del ciclo lunar, esta semana no es la mejor para comenzar nuevos proyectos, a pesar del hecho de que el 1 de enero sea el primer día del año y se considere el momento perfecto para fijar intenciones y sembrar semillas de lo que queremos manifestar en 2022. En lugar de ello, esperemos al 2 de enero: un momento más ideal para empezar cosas nuevas dado que está acompañado de la energía de la Luna Nueva.
El 23 de diciembre, los nodos lunares cambian. El Nodo Norte pasa de Géminis a Tauro y el Nodo Sur de Sagitario a Escorpio. Esta energía nos acompañará hasta julio de 2023. Los nodos lunares son los puntos donde la órbita de la tierra se interseca con la órbita de la Luna. Energéticamente, representan de dónde venimos y hacia dónde vamos. El Nodo Norte nos trae contactos, beneficios, ganancias y crecimiento. Nos muestra la misión y el camino. Al estar en Tauro y poner en práctica las características de la tauromaquia nos favorecerá. Con base en este principio, las actitudes que deberíamos activar son: seriedad, estabilidad, determinación, perseverancia y paciencia. ¡Pero no nos olvidemos del disfrute, el placer y la belleza! Con el Nodo Norte en Tauro, podemos reflexionar sobre nuestra relación con el dinero, nuestra capacidad para generar recursos y nuestros valores materiales. Por otro lado, el Nodo Sur representa pérdidas, insatisfacción, separación, conflicto, excesos y patrones de conducta. Al estar en Escorpio, la invitación es a prestar atención a los resentimientos, la obsesión, la manipulación, los celos, el control y la emocionalidad. Estas conductas nos conducen a las pérdidas. Con este contexto, podemos concluir que parte de la misión de este año es buscar estabilidad.
El 1 de enero, Mercurio entra en Acuario. Esta es una buena ubicación para el veloz planeta, la estrella de la comunicación y la actividad mental. Al estar en Acuario, Mercurio puede comunicar de una forma innovadora, moderna y futurista. Podemos ver manifestaciones por la igualdad, la libertad y la revolución. Mercurio en Acuario se siente libre de expresarse; tan solo tienes que tener cuidado de no ser demasiado radical durante este período y abstenerte de no ser demasiado frío en tu comunicación.
Uno de los movimientos más importantes del año ocurre esta semana: la entrada de Júpiter a Piscis el 28 de diciembre. Júpiter entró en Acuario en diciembre de 2020, lo cual nos benefició y nos dio la experiencia de ser más humanistas, altruistas e intelectuales. Gracias a este aspecto, la utopía de un mundo mejor y bienestar social comenzó a verse como una realidad posible. Júpiter acompañó a Saturno durante este año y ahora continuará en Acuario para consolidar estructuras sociales, tal y como lo hizo el año que transcurrió. Júpiter es fortalecido al entrar en Piscis y unirse a Neptuno, quien también es fortalecido en este signo. Júpiter en Piscis nos favorecerá al expandir la espiritualidad, la empatía, la misericordia, la piedad y nuestra capacidad de dar. Piscis busca fundir las almas y borrar las fronteras físicas. Necesitamos esta energía después de haber estado tan fríos el año pasado, con Júpiter y Saturno en Acuario. Podemos esperar más misericordia para este nuevo ciclo anual. El mundo del arte también se va a beneficiar. Debido a la energía de Piscis, debemos tener cuidado con la evasión y cualquier medio para alcanzarla, como las drogas o el alcohol, etc.
Durante esta semana, el lunes 27 y martes 28, las actividades en pareja que tengan que ver con la belleza se beneficiarán. El miércoles 29 y jueves 30, hay que tener cuidado con la hipersensibilidad, los celos y el control. Disfruta de practicar la meditación y abstente de estar en lugares con multitudes. El viernes 31 y sábado 1 son buenos días para ser positivos, abrir nuestros horizontes, viajar y celebrar. Esta energía es perfecta para celebrar el Año Nuevo, así que disfrútala. El domingo 2 es un buen día para hacer algo diferente y romper rutinas. ¡Aprovecha estas energías!
Esta semana tenemos la porción de Vaerá. En ella, Moshé habla con el Faraón y con el pueblo de Israel sobre la liberación de los israelitas, y ninguna parte lo escucha. Internamente, Moshé no creía que podía hacer esa labor. Esta semana, con la entrada de Júpiter y Mercurio en Piscis, podemos conectarnos con la energía del amor incondicional, la misericordia y la certeza absoluta. Y, más importante aún, podemos ser uno con el Creador. Cuando nos encontramos en ese estado, no hay lugar para inseguridades o dudas. Esta semana, con la energía de la porción de Vaerá y los beneficios que el cosmos nos da, adhirámonos a la energía del Creador.
Que tengan una maravillosa semana.