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Hola a todos, otra excelente semana comienza con una bendición fantástica adicional: el “día festivo y completo” [1] de Janucá, ¡la zona de tiempo de los milagros y Luz! Digo completo (tal y como Rav Berg lo llamaba) porque la festividad viene a completarnos. Con esto en mente, ¡examinemos las estrellas!
Al inicio de la semana, la Luna está en el poderoso Escorpio, y un nuevo combo de cuerpos celestes se sitúa en la novena casa, el dominio astrológico de las enseñanzas espirituales y de toda forma de elevación. Este grupo de cuerpos (Neptuno, Marte, Quirón y el Nodo Sur) están en el místico Piscis. Aún hay una gran cantidad de agua disponible en el cosmos, sobre todo Escorpio y Piscis. Marte, en su nueva posición en Piscis, nos ofrece un tiempo para la reflexión y el entendimiento más profundos en lugar de la acción directa.
Además, Mercurio ahora está en movimiento retrógrado. ¡Es ese momento del año otra vez! Aunque los movimientos retrógrados pueden crear demoras y problemas de comunicación, suelen ofrecernos un boleto de regreso a la máquina del tiempo para arreglar lo que hace falta arreglar. Así pues, preparémonos para nuestra nueva misión: quitar las capas de ilusión de nuestra vida, ir más profundo para revelar lo que está oculto.
Hay nueve planetas en agua y, definitivamente, ¡estamos en el Noventa y Nueve Por Ciento! Toda esta agua abre una ventana de entendimiento; todo consiste en la percepción. Al mirar más de cerca, nos damos cuenta de cuán diferentes son nuestros filtros. Literalmente, ¡hay cientos de maneras de interpretar cada suceso de nuestra vida! Entonces, ¿cómo podemos llegar a la verdad detrás de todo? Nuestra maestra, Karen Berg, tiene un excelente consejo: si queremos sentir la verdad detrás de las situaciones y las personas, y entender mejor sus necesidades, debemos aprender a despejar nuestra mente.
Nuestros cerebros son como máquinas parlantes que analizan, hablan y a veces gritan… ¡A menudo es tanto así que no podemos escuchar nuestros propios pensamientos! Y por “nuestros” me refiero a nuestro VERDADERO ser, es decir: nuestra alma. Nuestro cuerpo es un templo, la morada del alma. El trabajo que tenemos en este momento es llegar a estar más en contacto con nuestro verdadero ser (nuestra alma), con nuestro verdadero trabajo.
Esta semana, podemos establecer verdaderamente una conexión con nuestra Luz interior. Podemos abrir realmente nuestra Luz intuitiva y volvernos una versión más genuina de nosotros mismos. Entonces, a nivel práctico, ¿cuál es nuestro plan?
Ante todo, ¡debemos callar nuestro cerebro! Así pues, esta semana, intentemos practicar un poco de respiración profunda. ¡Lo necesitamos porque no queda aire en las estrellas! Mientras que nuestra mente y corazón están como un motor recalentado, nuestros pulmones son órganos que apagan el fuego. La respiración profunda nos ayuda a sentirnos mejor, calmarnos y conectarnos más con nuestra alma.
En medio de la confusión mundial, un simple ejercicio que siempre podemos hacer es sólo apartarnos y simplemente respirar profundamente un par de veces. Te sentirás mejor más rápido de lo que crees. ¿Por qué? El aire es considerado como el elemento de equilibrio universal o, kabbalísticamente, la energía de la Columna Central del universo.
El segundo entendimiento de esta semana es que lo sabemos TODO. Todo está en nuestro disco duro, nuestra alma. Esta semana, podemos esperar tener déjà vu, sensaciones e imágenes de nuestro pasado, incluso encarnaciones pasadas, o sueños importantes, quizá hasta percepción extrasensorial. Gracias a que nos beneficiamos de la energía de milagros y completitud adicional esta semana, nuestro trabajo nos hará tener una visión y entendimiento más fuertes.
Esta semana, meditemos en la secuencia de los 72 Nombres de Dios llamada: “revelar lo oculto”, y abramos nuestro corazón a la verdadera Luz.
Mucho amor y Luz para todos, ¡que tengan un feliz “día festivo y completo” de milagros!
Yael
[1] Holy es “santo” y wholly es “completo” en inglés, cuando se pronuncian suenan igual y se refiere a que un día festivo o sagrado en realidad significa un día de completitud.