Esta semana no tiene tantos movimientos planetarios como las anteriores. El Sol sigue en Capricornio, una posición que favorece el compromiso y la responsabilidad, y también el trabajo y el esfuerzo. Los capricornio son excelentes para crear estructuras y fijar metas; son objetivos y realistas. Nuestra capacidad de planificar y organizar será fortalecida, así que aprovecha la situación del Sol al ser ambicioso y forjar tus metas.
Kabbalísticamente, estos son los últimos días en el ciclo lunar del mes de Tevet. Según la Kabbalah, las letras que rigen este mes son Ayin y Bet, que juntas tienen el valor numérico de 72. Estas representan la energía de los 72 Nombres de Dios, una de las herramientas más poderosas que los seres humanos tenemos para controlar nuestra realidad física y conectarnos con los mundos superiores. Si bien Capricornio es un signo de tierra (materialista, práctico y racional), esta energía tiene la capacidad de trascender lo material para conectarnos con a Luz Celestial. Recordemos que la Luna Nueva de este mes siempre cae en Janucá, el momento de la revelación de la Luz oculta detrás de todo, la Luz de los milagros y maravillas. Aunque el mes de Capricornio puede ser de trabajo duro, esforcémonos en revelar la Luz oculta en este mes, en especial en estos últimos días. Tenemos la oportunidad de trascender la materialidad al conectarnos con este ciclo lunar, que concluye el 1 de enero.
Esta semana comenzamos un nuevo año en el calendario gregoriano, y Capricornio despierta en nosotros la necesidad de terminar ciclos y empezar de nuevo. Quizá queramos hacer una lista de nuestras metas y planificar cómo queremos vivir esta siguiente vuelta alrededor del Sol. El 1 de enero ocurre en el cuarto menguante, una fase lunar que no es un inicio sino un final. Esta fase nos invita a concluir, depurar y purificar. Es el momento apropiado para analizar lo bueno y lo malo del mes que acaba de transcurrir y hacer un trabajo profundo de introspección. Aprovechemos la oportunidad para eliminar cualquier cosa que no nos sea útil y preparémonos para la Luna Nueva de Acuario. Este trabajo de conclusión nos permitirá recibir la Luna Nueva con más claridad y hacer espacio para lo nuevo. Mi recomendación es esperar hasta el 2 o 3 de enero para comenzar tus propósitos de año nuevo, dado que estos días son fértiles y contienen la energía de nuevos comienzos. El cosmos te ofrece su respaldo y apoyo para que tus semillas puedan germinar y alcanzar su máxima manifestación.
La Luna Nueva de Acuario abre la puerta a un ciclo muy distinto al del mes de Tevet. Acuario y Capricornio son regidos por Saturno, pero son dos energías opuestas. Saturno es el último planeta que podemos ver a simple vista y en la Kabbalah es considerado como el último planeta en el sistema solar que rige a un signo. El lado de Capricornio de Saturno es la cara que da al Sol y delimita el sistema solar. Esto nos muestra el aspecto limitante del planeta, una energía rígida que caracteriza al signo. En el caso de Acuario, es la cara que da al infinito, razón por la cual nos ofrece libertad de las limitaciones y rompimiento las estructuras. Incluso en la astrología gregoriana, el corregente de Acuario es Urano, considerado el regente del cielo. Este cuerpo celeste es la mente divina y la chispa de la Creación. Siempre ve las cosas desde el cielo, desde una perspectiva más abierta y global. Esto es parte de la energía que está disponible este mes.
Acuario es revolucionario, nos ayuda a romper límites y liberarnos de las ataduras que no nos sirven. Saturno en Acuario nos impulsa a comprometernos con la sociedad, a buscar la utopía perfecta de un mundo mejor. En este mes se verán beneficiados nuestra participación grupal, vida social y trabajo altruista. No obstante, este es un mes frío que carece de emoción. Aquellos nativos de este signo pueden comprometerse con una causa, pero les es difícil comprometerse a nivel personal o conectarse profunda y emocionalmente con aquellos que les rodean. Es un signo que siempre busca libertad.
Los acuarianos son personas rápidas e inteligentes, vanguardistas y tecnológicas. Tienen la gran capacidad de entender conceptos difíciles. De hecho, Urano es considerado como la “octava superior” de Mercurio. Recuerda: Mercurio representa el pensamiento y la inteligencia, por esto los acuarianos deben ser pacientes y tolerantes con quienes no tienen su capacidad mental. También es por ello que suele ser un signo incomprendido; tienen una forma de pensar y ver la vida desde una perspectiva nueva, fresca, futurista y creativa. Acuario rompe con las estructuras y crea nuevas tendencias.
La inteligencia de este signo los lleva a ser un motor constante de ideas; tienen mentes que no paran. Al igual que Géminis y Libra (también signos de aire), parte de su aprendizaje es dominar a la mente y no permitir que esta los domine a ellos en medio de esta continua creación de ideas que, por cierto, muchas veces se queda en el aire debido a la falta de practicidad y objetividad. Como si eso no fuese suficiente, la mente acuariana deambula constantemente en el ámbito del corazón, tratando de explicar emociones y sentimientos en vez de simplemente sentirlos. Este es uno de los grandes desafíos del signo: permitirse sentir y calentar sus corazones.
Leo es el signo opuesto y complementario de Acuario, ambos tienen los egos más inflados del Zodíaco: Leo en términos de la personalidad y Acuario en términos del intelecto. Ambos tienen la tarea de practicar la humildad. Si bien Leo es el monarca gobernante, que lucha por mantener la corona y lleno de responsabilidades, Acuario es el revolucionario que busca igualdad y no soporta la injusticia. Equilibrar la energía acuariana-leonina en este mes nos da la posibilidad de experimentar un liderazgo desde la igualdad y el bien común. En este mes tenemos la apertura cósmica de Tu Bishvat, el día en que el Sol está en Acuario y la Luna en Leo, precisamente equilibrando la energía de estos dos signos. Este día comienza un ciclo anual para el reino vegetal. En su libro Días de poder, Rav Berg compartió la fuerza de esta apertura cósmica: el reino vegetal tiene el poder de germinar y crecer constantemente en contra de la fuerza de gravedad, es por ello que este mes tiene la capacidad de ir en contra de nuestro Deseo de Recibir para Sí Mismo.
Venus todavía está en movimiento retrógrado en Capricornio. Venus retrógrado significa una falta de objetividad y lógica en el amor. Esto no significa que el amor siempre tenga que ser realista y lógico, pero hay inestabilidad, falta de claridad, intensidad y confusión. Así que no es el mejor momento para enamorarse, pero tengamos paciencia y tolerancia con nuestros seres amados. Durante este período, nuestros sentidos están en modo hipersensible y podríamos estar irritables. En este período, Venus nos da la oportunidad de enmendar relaciones del pasado.
La posición de la Luna determina la variación de la energía de un día a otro dado que este es el astro más rápido y, mientras transita, activa la vibración del lugar donde se encuentra. El domingo 2 y lunes 3, la Luna estará en Capricornio, al igual que el Sol, Venus y Plutón, lo cual intensificará las características capricornianas de la responsabilidad, el trabajo, el esfuerzo y el compromiso. Estos son días favorables para manifestar nuestros planes y alcanzar nuestras metas, y también estructurar y planificar. Tengamos cuidado con ser demasiado rígidos, duros y severos. En lugar de ello, inyectemos misericordia en todo lo que hagamos. El martes 4 y miércoles 5, la Luna, desde su posición en Acuario, nos invita a liberarnos, alternar rutinas e integrar el cambio. Tengamos cuidado con el comportamiento errático y poco convencional. Estos son momentos en los que podríamos ser muy fríos con las personas que nos rodean; tratemos de ser más cálidos. El jueves 6, viernes 7 y sábado 8, la Luna estará en Piscis. Esta Luna se encontrará con Júpiter y Neptuno, lo que favorecerá nuestra sensibilidad artística e intuición. Estos días son para permitirnos soñar e inspirarnos. La espiritualidad obtiene fuerza y se beneficiará la meditación, la oración y la reflexión. Nos sentimos empáticos y emocionales; tan solo tengamos cuidado de no caer en la pereza.
Esta semana estudiamos la porción de Bo, en la que el Creador le dice a Moshé: “Ven al faraón”. Es una frase confusa dado que en lugar de “ve” dice “ven”, lo que nos muestra un concepto profundo. Primero, debemos lidiar con nuestra propia negatividad. Debemos ir a nuestro interior y trabajar profundamente en nosotros. Necesitamos ir a la semilla de aquello que causa todo el caos en nuestra vida y esto cambiará de inmediato el caos a nuestro alrededor. La negatividad no es externa; comienza con uno mismo. Que la energía de esta semana te dé la fuerza y las herramientas para poder hacer tu trabajo espiritual.
