Durante la semana de Pésaj, podemos saltar para trascender los obstáculos y ubicar nuestras cartas astrológicas en el plano de la libertad y las bendiciones. El mes de Aries es llamado Nisán, que deriva de la palabra nes (milagros). El Séfer Yetsirá, el antiguo libro de astrología escrito por Avraham el Patriarca, asocia a Aries con la “pierna derecha”; Michael Berg explica que es la energía del salto. De esto se trata la astrología kabbalística: obtener libertad de las influencias negativas del Zodíaco al usar las herramientas espirituales apropiadas.
Avraham el Patriarca, autor de este libro, era aries. Y si bien su carta astrológica indicaba que él y su esposa Sará no podían tener hijos, él saltó ese destino y lograron concebir un hijo, Yitsjak, que nació en Pésaj.
Por lo tanto, es buen momento para reflexionar y preguntarte: ¿dónde hay aspectos difíciles en tu carta? ¿En qué aspectos de tu vida estás lleno de frustración, tristeza, enojo o miedo? La noche de Pésaj es una maravillosa oportunidad para crear cambios en tu vida.
Este año tenemos un Pésaj muy especial. Después de muchos siglos, los dos gigantes de nuestro sistema solar, Júpiter y Saturno, están en Acuario. Unen fuerzas con la enorme energía de Aries durante Pésaj, lo cual nos ofrece una dosis más alta de libertad. Literalmente podemos eliminar cualquier obstáculo de nuestra carta natal (preocupación, miedos, limitaciones, bloqueos, etc.).
La noche de Pésaj tendrá un aspecto difícil con Mercurio, el planeta de las palabras, que estará en Piscis sufriendo una oposición de la crítica y escéptica Luna en Virgo. Sabemos que las palabras severas que nos decimos a nosotros mismos son la causa de nuestras limitaciones. Las veces en las que nos hemos condenado llenos de rabia con frases como “no soy suficientemente bueno”, “nunca podré lograrlo” o “es demasiado bueno para ser cierto” crean una prisión para nosotros.
El 27 de marzo tendremos una luna llena y entrará la energía de Pésaj, que también cae un sábado; una oportunidad única e inusual para hacer conexiones. Se dice que el Rey David convertía cada noche de sábado en una gran celebración con canciones, unión, amistad y comida. Los kabbalistas la llaman “Melavé Malká”. Es una abertura especial conectada a la alegría y la felicidad. La energía perdura siete días.
Y si miran el cielo el 27 de marzo, podrían ver una Estrella de David en formación. El 29 de marzo (a las 03:10 a. m. hora de Jerusalén), seis aspectos forman en el cielo una Estrella de David perfecta (o “Escudo de David” como se llama originalmente). Cuando esta estrella aparece, recibimos protección de los pensamientos positivos y la tristeza, dado que David representa a la Luna, un símbolo de nuestra inteligencia emocional.