¡Demos la bienvenida al mes lunar de Leo! Es llamado Av en arameo, que literalmente significa padre; un nombre muy apropiado, dado que el mismísimo Sol es el regente de este mes. Los kabbalistas añaden un nombre a este mes y se refieren a él como Menajem Av (padre consolador). Efectivamente, este mes está asociado a lo mejor y lo peor de la humanidad: el momento más desafiante del año está en este mes (el 9 de Av, llamado Tishá BeAv) y el día más emocionante ocurre durante su luna llena (llamado Tu BeAv, la versión kabbalística del Día de San Valentín). ¡No es de extrañar que haya tantos sentimientos encontrados con relación al mes lunar de Leo!
Para entender mejor la razón, acudamos al manuscrito kabbalístico más antiguo, el Séfer Yetsirá (o Libro de la Formación) para ver qué dice sobre Leo:
Y Él hizo a la letra Tet reinar sobre la audición
y le ciñó una corona,
y la combinó con otra.
Y con ellas Él formó
a Leo en el universo,
a Av en el año
y al riñón izquierdo del alma, masculina y femenina.
También aprendemos que las dos tribus de Israel que rigen este mes son las de Yisajar y Shimón. Yisajar está relacionado con el conocimiento y los estudios espirituales, mientras que Shimón está relacionado con la energía de destrucción de la Columna Izquierda. La clave para transformar el mes lunar de Leo en el período maravilloso que queremos que sea es conectarnos con la energía de unificación en vez de la división.
Si miramos con atención la carta astrológica del molad, o nacimiento de la Luna Nueva, encontramos que es increíblemente emocional. De hecho, es mucho más acuoso de lo que podríamos esperar de un mes tan fogoso. Además, cuatro planetas siguen en movimiento retrógrado, lo cual crea una sensación de “cámara lenta” y pesadez. Marte es el único planeta con el que podemos contar este mes, que se mantiene digno en Aries.
El mensaje es claro: avanzar con precaución, ¡y no dejar que nuestros sentimientos nos controlen!
El Sol, regente de Leo, verdaderamente simboliza el ser. En términos de los arquetipos de Jung, representa nuestro poder mental y valentía. El Séfer Yetsirá señala con mucha razón que la “audición” es el secreto de este mes, ya que la letra aramea Tet —que creó al signo— está invertida hacia dentro para mostrarnos que debemos internalizar nuestros procesos y no proyectarlos en los demás.
Ignorar este hecho es lo que genera división y destrucción. Es mucho más fácil proyectar la responsabilidad en los demás, en lugar de unificar. El noveno día del mes lunar, Leo fue testigo del mayor autosabotaje de la historia humana. Todo comenzó, al igual que siempre, con un pequeño incidente que fue aumentando hasta convertirse en una enorme masacre. Esto es algo que el siglo XXI está aprendiendo lentamente.
Con Plutón en Capricornio hasta el año 2024, el bien de la comunidad se convierte en prioridad. Saturno en Acuario crea un nuevo orden: el “yo” y el “nosotros” se vuelven igual de importantes. Con esto en mente, podemos prepararnos para el día más hermoso de unificación lunar que Leo nos ofrece: Tu BeAv, la luna llena en el mes de Leo, la unión entre el Sol y la Luna. En ese día, podemos atraer la Luz de las almas gemelas en todas las áreas de nuestra vida; ¡es un día importante en nuestros calendarios! (Miércoles, 5 de agosto).
¡Jódesh tov para todos!