Bienvenido al mes de Virgo, un signo de tierra con influencia interna de aire. Este signo, regido por Mercurio, es sinónimo de sentido común. La estructura, el intelecto, la lógica, la practicidad, la eficiencia y el perfeccionismo son algunos de los dones (¡y desafíos!) de este mes, como bien conocen los nacidos bajo este signo.
Este mes recibimos un enorme apoyo para hacer introspección y reconocer nuestros defectos y lo que necesitamos cambiar. Es el momento adecuado para cultivar un fuerte deseo de mejora y transformación. Pero, al mismo tiempo, todos podemos tener problemas con ser demasiado críticos, quisquillosos y, a veces, demasiado lógicos. La espiritualidad es una idea clave este mes. Ver más allá del mundo físico —el 1 %, la mente lógica— es lo que puede ayudarnos a emplear mejor los dones de este mes.
Demos un vistazo a las alineaciones cósmicas de este mes para aprender a aprovechar las positivas y transformar las más desafiantes.
En la primera semana del mes, el Sol sigue en Leo, formando un aspecto positivo con el Nodo Norte en Aries. El Nodo Norte representa el tikún principal en el que todos, en conjunto, debemos concentrarnos en este momento. El Nodo acaba de cambiar a Aries, indicándonos que acojamos nuestra individualidad, seamos valientes y exploremos nuevos territorios. Dado que el Sol en Leo forma este aspecto positivo, se nos insta a ir tras nuestros deseos y desarrollar el amor propio y la autenticidad.
Asimismo, durante esa semana, Mercurio y Marte forman un poderoso aspecto con Urano, dándonos otro empujón hacia la manifestación de avances reales en nuestra vida. Y con el poder adicional de Virgo, recibimos apoyo para llevar proyectos a término y seguir las ideas con la acción.
Durante la segunda semana del mes (23/8), Mercurio entra en movimiento retrógrado. Mercurio está en el signo de Virgo, su signo regente. Normalmente, cuando Mercurio está retrógrado, puede indicar algunos retrasos o problemas de comunicación. Pero esta vez, la retrogradación puede ayudarnos a todos en el trabajo espiritual que está disponible para nosotros en el mes de Virgo. Los kabbalistas enseñan que, en el mes de Virgo, podemos regresar en el tiempo y revisar cualquier negatividad que hayamos creado el último año. Al revisarla y reconocer el daño que pudimos haber creado (a nosotros mismos u otras personas), podemos transformar energéticamente esta negatividad en positividad, que puede apoyarnos en el año venidero. Esta es una gran oportunidad que solo recibimos en el mes de Virgo, un portal cósmico de transformación. La retrogradación de Mercurio en este mes puede ayudarnos a obtener una nueva perspectiva y comprometernos con el trabajo espiritual de limpieza y transformación.
La tercera semana del mes presenta otra poderosa oportunidad. Hay un aspecto favorecedor entre Júpiter y el Sol del 2 al 10 de septiembre. La oportunidad aquí es vernos a nosotros mismos bajo una luz positiva, a fin de visualizar nuestro potencial y las grandes oportunidades que pueden surgir en el mes y el año entrantes. Todos podríamos recibir un impulso de entusiasmo y motivación.
La mayoría de los aspectos de este mes son positivos y alentadores, pero debemos tener en cuenta la última semana del mes, cuando Venus desafía a Júpiter. Es el momento de tener cuidado con las palabras y las interacciones con los demás. Evita dar por sentados a los demás y sentirte superior. Intenta no actuar con superioridad cuando estés muy seguro de tu punto de vista.
Este es un gran mes para la transformación y el crecimiento. Aprovechemos todas las oportunidades cósmicas y convirtámonos en la mejor versión de nosotros mismos.