Esta semana ofrece tres importantes oportunidades espirituales para todos nosotros. La primera oportunidad ocurre el 23 de noviembre, cuando el planeta Mercurio y el planeta Neptuno forman un aspecto positivo. Este aspecto tiene el potencial de ser muy motivador y atizar un despertar espiritual. Neptuno despierta una energía poderosa pero gentil que puede abrir un canal a una dimensión espiritual más elevada. La meditación, participar en actividades creativas y conectarte con tu imaginación pueden ser herramientas poderosas para elegir al comienzo de la semana. Este sin duda es un buen momento para escuchar tu voz interior y despertar agradecimiento de forma proactiva por todas las bendiciones que tienes actualmente en tu vida.
El 27 de noviembre recibimos la segunda oportunidad espiritual, que es confiar en la Luz y mantenernos abiertos a cualquier cambio o energía inesperada que se presente. Aunque Venus esté en oposición a Urano durante este día, es posible que durante todo el año se pongan a prueba nuestra confianza y certeza en el panorama completo, en especial en nuestras relaciones y en las situaciones financieras.
El 28 de noviembre, el último día de esta semana, el planeta Neptuno despierta y comienza su movimiento directo nuevamente después de un largo período de cinco meses en movimiento retrógrado. Esto significa que la expresión de energía de Neptuno vuelve a la vida y nos afectará potencialmente a todos al impulsarnos hacia delante. El mundo ilusorio puede ser muy fuerte y engañoso durante este año entrante, y esta semana podemos obtener control total sobre él.
Dado que el mensaje espiritual de esta semana nos insta a “salir” (Vayetsé) o trascender cualquier limitación o condicionamiento de la mente, nos recuerdan constantemente hacer un análisis de la realidad antes de avanzar y evaluar constantemente dónde y cómo la Luz es parte de cualquier desafío futuro.
¡Mantengamos la certeza y la fuerza, y busquemos ser un mejor canal de la Luz para los demás esta semana!