¡Feliz Año Nuevo kabbalístico para todos!
El primer mes del Año Nuevo kabbalístico llega con la muy necesaria claridad e impulso hacia delante. Si bien Rosh Hashaná no es el comienzo del año del calendario gregoriano, es el comienzo de un nuevo año espiritual y trae consigo poderosas oportunidades. La festividad siempre sucede en el momento preciso en que el cosmos se alinea para la máxima expresión de limpieza y renovación. Es verdaderamente el comienzo del año espiritual.
Rosh Hashaná es literalmente una ventana en el tiempo. Durante estos dos días —y solo durante estos dos días— tenemos la oportunidad de corregir todas y cada una de las acciones negativas que hemos realizado durante los últimos doce meses. Y al hacerlo, podemos eliminar por completo cualquier efecto negativo de esas acciones para el próximo año.
Además, la oportunidad que tenemos en Rosh Hashaná no se limita al año que termina. La Kabbalah enseña que cada año es un microcosmos de toda nuestra vida, incluso de vidas anteriores. Por lo tanto, las acciones del año pasado que ahora debemos tratar expresan la negatividad que nuestras almas se han esforzado por corregir vida tras vida. Rav Berg enseñaba que nos corresponde comprometernos a hacer un profundo examen de conciencia antes de Rosh Hashaná y darnos cuenta de los cambios que se han producido desde hace un año. El cambio es imprescindible. Mientras estemos en esta tierra, debemos crecer y transformarnos. Busca los cambios que se hayan producido en tu vida desde el año pasado. Piensa en los cambios que quieres hacer el año entrante.
Astrológicamente hablando, con el reingreso retrógrado de Plutón en Capricornio, a toda la humanidad se le ofrece la oportunidad de reflexionar y sanar. Este próximo año 2024 plantea algunas preguntas serias sobre lo que nos hace felices y plenos en nuestra vida. Toma nota de la diferencia entre dónde estamos ahora y dónde queremos estar realmente. Durante el resto de 2023, piensa que estás en “modo recuperación”. Eso significa prepararte para algunos grandes avances y cambios cuando Plutón regrese a Acuario el 20 de enero de 2024. ¡Eso será en apenas unos meses! El trabajo interior y la reflexión de este año sentarán las bases para ese cambio inminente.
Desde luego, las cosas no siempre mejoran en un abrir y cerrar de ojos. Lo que resuena en tu interior se refleja en el exterior y, en definitiva, ayuda a todos a crear un futuro mejor. Esa es la misión de la humanidad para las próximas dos décadas. Este Año Nuevo, el mundo está a punto de cambiar. Es el comienzo de una nueva era y de un nuevo tú. ¿Sientes los vientos de cambio? Tal vez no puedas identificarlo. O tal vez ya seas consciente de lo que está a punto de cambiar. Esta ventana en el tiempo, llamada Rosh Hashaná, es un período de transición y transformación.
Cada tránsito astrológico viene acompañado de una oportunidad única. Mercurio entra en movimiento directo el día de Rosh Hashaná (15 de septiembre) para permitirnos una conversación sincera con nuestra alma. Más adelante, en octubre, Plutón se pondrá directo y Marte entrará en Escorpio. ¡Y luego habrá un eclipse solar de Luna Nueva! Es una energía muy intensa. Trabajar con esas energías no es fácil, pero el viaje vale la pena. Al igual que un diamante se forma cuando se somete a alta presión, una nueva y mejor versión de ti mismo cobrará vida cuando hagas “el trabajo”.
En enero de 2024, Plutón transita hacia Acuario. Esta es nuestra oportunidad de cocrear con el universo y transformar nuestra vida de formas que nunca antes lo habíamos hecho. A veces, nos resistimos al cambio y nos aferramos a lo conocido al estilo “sé lo que hay que hacer”. Lo último que queremos es quedarnos estancados en el pasado o en viejas maneras de hacer las cosas. Algunas áreas de nuestra vida tienen un final natural. Cuando una puerta se cierra, siempre se abre otra.