Este año es bisiesto en el calendario kabbalístico, por eso tendremos dos meses de Piscis. El año bisiesto se presenta siete veces en 19 años, eso permite que el calendario solar y lunar permanezcan alineados. Doce meses lunares son 354 días, mientras que el año solar tiene 365 días. Agregamos otro mes de Piscis para que todo se iguale.
"¿Cómo nos conectamos con esa felicidad?"
Piscis es el signo que contiene a todos los signos. Puede llevarnos más allá de los límites de la realidad y darnos la capacidad para ver más allá de nuestro caos. Se dice que cuando llega Adar (Piscis) nos llenamos de felicidad. ¿Y qué queremos realmente en la vida? ¡Ser felices!
¿Cómo nos conectamos con esa felicidad? Primero, veamos por qué no somos felices:
· Porque no tenemos lo que creemos que debemos tener.
· Porque creemos que los demás son mejores y más exitosos que nosotros.
· Porque consideramos que no somos suficientemente buenos y no creemos en nosotros mismos.
· Porque sentimos que no somos amados y no tenemos a nadie a quien amar.
Todo eso son historias que nos cuenta nuestro ego para quitarnos poder. Escuchamos: “No eres suficientemente bueno. No eres capaz. No hay forma que lo logres. No estás haciendo lo que deberías. Eres perezoso”, etc. Este mes tenemos una mayor capacidad para eliminar esa negatividad y encontrar claridad.
A lo largo de este mes y todo el año, los dos planetas que rigen a Piscis son Júpiter y Neptuno. Ambos planetas están en sus propios signos (Júpiter en Sagitario y Neptuno en Piscis), lo cual los vuelve muy poderosos y les hace dar el máximo. Ni Júpiter ni Neptuno tienen límites. Para ellos todo es posible. Imagina: ver más allá del límite de los cinco sentidos. Los planetas se unen en el cielo formando una relación compleja (muy espiritual y poco concreta). Sin embargo, nos despierta para que nos podamos conectar con la versión más elevada de nosotros mismos.
"Nos despierta para que nos podamos conectar con la versión más elevada de nosotros mismos."
Por otro lado, tenemos una muy fuerte energía de Capricornio que nos pide acción. Puede mantenernos muy conectados con el mundo material. Para ser felices necesitamos encontrar el equilibrio entre el mundo material y el espiritual. En mi vida como maestra espiritual veo tres tipos de personas:
1. Materialistas: miden su felicidad conforme a lo que tienen en su vida.
2. Espirituales: no necesitan mucho del mundo material. Estudian, meditan y quieren hacer el bien en el mundo, pero tienden a quedarse en la pobreza.
3. Las personas que saben disfrutar del mundo material mientras invierten en su espiritualidad.
Grupo uno
Hace años, un niño se alegraba cuando le dabas un auto de juguete. Jugaba todo el día con el auto y lo llevaba a todas partes. Hoy en día los niños tienen autos grandes y pequeños, autos negros y rojos. Y no se alegran. Reciben regalos de cumpleaños y nos les importa. La abundancia que tenemos hoy es tan grande que olvidamos disfrutar las cosas que tenemos y constantemente buscamos más.
Grupo dos
Ellos creen que ser espirituales significa que las cosas materiales no son importantes. No entienden por qué tienen problemas para llegar a fin de mes si están conectados a nivel espiritual, creen que, si meditan lo suficiente, tendrán más oportunidades.
Grupo tres
Los más equilibrados son los más felices.
Este es el mes de abundancia, intuición, conexión con el plano superior, el propósito superior y los milagros sin límites. ¿Cómo nos conectamos? En nuestros momentos más oscuros, cuando el caos se siente más real y parece que no tenemos control sobre lo que ocurre, necesitamos recordar con total certeza que la Luz del Creador nunca nos abandonará. Mantén la fe y lucha por ver lo bueno. Los milagros ocurren cuando nos aceptamos como somos y confiamos en el proceso.
Otro aspecto de este mes es Marte en Aries en conjunción con Urano en Aries. Marte es el regente de Aries: el planeta y el signo de la acción y la guerra. Urano en Aries representa la lucha por la independencia. Pregúntate: ¿Contra quién estoy luchando? ¿Estoy peleando contra enemigos externos o contra mi propia negatividad?
"Lleva la Luz a todo lo que haces."
La negatividad es el enemigo. Así pues, si nos sentimos tristes y desmotivados, no es debido a los demás. Es debido a que estamos al fondo del siguiente nivel y necesitamos avanzar; es decir, tenemos que ocuparnos de nuestras circunstancias. A veces “hacer algo” significa bajar la velocidad, meditar y pedir fuerza para continuar. Conéctate con los ángeles y los mensajes que envían. La rabia, la frustración y la tristeza no nos alcanzarán allí. Entonces, si te encuentras en ese estado mental, usa el Aná Bejóaj y pide ayuda a los ángeles. Recuerda que solo es una prueba.
Este mes:
1. No permitas que tu ego te diga que no eres suficientemente bueno.
2. Aprecia todo lo que tienes en la vida y todo lo que eres.
3. Lleva la Luz a todo lo que haces.
4. No le creas a quien te diga que no puedes lograr lo que quieres.
5. Lucha por permanecer positivo y recuerda que todo estará bien.
6. Usa la herramienta del Aná Bejóaj. La energía de este mes nos ayuda a eliminar la negatividad.
7. Encuentra el equilibrio entre tus sueños y la realidad.