Cuando comenzamos a caminar un sendero espiritual por primera vez, nos sentimos inspirados a agitar y a mover las cosas. En nuestra búsqueda por hacer del mundo un lugar mejor nos provoca revolucionar algo y comprometernos con acciones de gran envergadura para marcar una diferencia en la vida de otros. Aquello que por lo general pasamos por alto es que el camino hacia una conexión más profunda con la Luz del Creador puede también ser un sendero silencioso.
Éste también es un camino que muchos han transitado antes que nosotros. Cada kabbalista y gigante espiritual que nos inspira ha experimentado la verdadera transformación. A medida que buscamos el crecimiento espiritual, es importante recordar que no necesitamos reinventar la rueda cuando de nuestra práctica espiritual se trata. Al seguir los pasos de los grandes kabbalistas y permitir que sus acciones pacíficas y positivas nos inspiren, podemos acceder a los poderosos canales de Luz que ellos crearon y que continúan trayendo Luz a este mundo.
De acuerdo con Michael Berg: “No se nos pide crear un camino que no exista aun, ni tampoco que despertemos nada nuevo. Simplemente estamos encontrando los caminos hacia los milagros que los gigantes espirituales de la historia han trazado para nosotros”.
Rav Brandwein, fundador del Centro de Kabbalah, se encontraba una vez visitando su ciudad natal Safed con el Rav Berg y otro estudiante. Los tres hombres salieron a caminar, disfrutando de una hermosa tarde de Shabat cuando un gran autobús de turistas se detuvo y de él salió un mar de personas. El guía turístico le preguntó a Rav Brandwein si podría mostrar al grupo los alrededores. Rav Brandwein saltó ante la oportunidad y dedicó una hora a enseñar la ciudad a los turistas, compartiendo con ellos la historia de la ciudad, las leyendas y describiendo los lugares resaltantes, todo mientras los turistas fumaban y tomaban fotos del lugar (acciones que rompen la conexión con Shabat).
Luego de que el grupo se retiró, el estudiante que acompañaba a Rav Brandwein y a Rav Berg comentó: “¡No entiendo! ¿Cómo, en medio de Shabat, pudo usted caminar con las personas y servirles de guía de la ciudad mientras fumaban, tomaban fotos y hacían todas las cosas que no están conectadas con Shabat?”.
Ante esa interrogante, Rav Brandwein respondió: “¡Yo no vi a nadie fumando ni tomando fotografías!”.
No era que Rav Brandwein no vio a los turistas romper la conexión con Shabat. Más bien, en su subconsciente, Rav Brandwein escogió enfocarse en las personas a su alrededor, no en sus acciones. Con una conciencia tan elevada, él pudo ver sólo lo bueno y continuar conectado con la energía positiva del Shabat.
Los primeros seguidores del Baal Shem Tov fueron llamados una vez los frielicheh o “Los felices”. Lo que los hizo destacar fue su actitud de júbilo perpetuo. Ellos fueron conocidos por comenzar a cantar y a bailar repentinamente y de manera muy fácil. De acuerdo con el Baal Sham Tov, “La habilidad para estar alegre, al discernir lo bueno y lo alegre dentro de cada experiencia, es un mandamiento bíblico”. A veces el acto espiritual más revolucionario es simplemente tener una actitud positiva y celebrar lo bueno en el mundo.
Existe una historia acerca del Rav Simjá Bunim de Peshijá, quien fue llamado en una oportunidad para que ayudase cuando un joven de la ciudad se estaba ahogando. Él era conocido por atraer grandes bendiciones y milagros, así que las personas de la ciudad naturalmente corrieron hacia él por ayuda. Es un don muy especial el poder invitar bendiciones a nuestra vida con alegría. Sabiendo esto, el Rav se acercó a la orilla del río y llamó al chico diciendo: “hazme un favor y ¡Salúdame a las ballenas!”.
En un momento tan serio como ese, muchas personas se molestaron con su respuesta. El comentario parecía cruel y no ayudaba en nada. Sin embargo, fue más que suficiente para disminuir el pánico del chico quien pudo atraer la Luz y ser salvado, ¡todo porque el Rav iluminó el momento con un comentario tonto! Los kabbalistas enseñan que resulta extremadamente difícil atraer bendiciones cuando nos encontramos en un estado de carencia o experimentamos angustia. La depresión, la tristeza o la preocupación pueden evitar que los milagros entren a nuestra vida. El joven pudo pedir ayuda desde un lugar de júbilo aunque se encontraba en una situación desesperada.
Sin lugar a dudas, los notables gigantes espirituales del pasado han traído gran Luz al mundo al defender a otros, peleando contra la injusticia o instituyendo un cambio sistemático, sin embargo, también han abierto grandes canales de Luz a través de acciones silenciosas, como simplemente escoger ver lo bueno en otros y vivir con un corazón alegre. Michael Berg dice: “estos canales son obsequios entregados a nosotros por los gigantes espirituales de generaciones previas. Por medio de sus acciones positivas, ellos crearon viaductos espirituales a través de los cuales la Luz de los Mundos Superiores entra a nuestro plano físico”.
Si bien el camino espiritual para cambiar el mundo para mejor puede resultarnos nuevo, muchos ya han transitado este sendero y han tenido éxito en marcar una diferencia en la vida de otros. Nuestro trabajo entonces es acceder a esta energía y continuar con su gran trabajo al ver y celebrar lo bueno para poder traer más Luz a este mundo.