Este artículo fue publicado originalmente en 2018.
El mes de Capricornio es especial porque inicia en el séptimo día de Janucá. El mes anterior, Sagitario, fue un tiempo en el que tuvimos la capacidad de atraer milagros a nuestra vida. Esa capacidad deriva del evento cósmico de Janucá, el canal para los milagros, que ahora continúa en Capricornio.
“El Zóhar se refiere a la Shejiná como nuestro ‘escudo protector’”.
¿Por qué ocurre esto? Para entender los regalos y los desafíos que están disponibles para nosotros en este mes, Rav Berg explica del Zóhar que hay tres meses en los que predomina una gran cantidad de juicio y negatividad. Estos son los meses de Cáncer, Leo y Capricornio. Pero no es apropiado ver a Capricornio simplemente como un mes de juicio.
Hay un entendimiento más profundo, poderoso e importante presentado en la sección del Zóhar con relación a este mes. En lugar de ser un mes negativo, más bien es un mes con una sobreabundancia de Luz.
Rav Áshlag también habló de este principio. Tal y como escribió, durante este tiempo la Shejiná, el aspecto femenino del Creador presente en nuestro mundo, no es revelada. La Shejiná no es algo que podamos detectar con nuestros cinco sentidos, pero el Zóhar se refiere a la Shejiná como nuestro “escudo protector”. Explicado de manera simple, cuando la Shejiná está activa, evita que recibamos una sobredosis de la Fuerza de Luz del Creador.
Del mismo modo en el que la tierra necesita la capa de ozono para protegerse de los rayos del sol, nosotros también necesitamos protección del infinito poder de la Luz sin filtrar. Por eso, en vez de una ausencia de Luz en este mes, lo que está ausente es el escudo protector que generalmente limita la cantidad de Luz que llega a nuestro mundo.
Con este entendimiento, comenzamos a tener una idea de en qué consiste este mes. Es un mes sin filtro y una sobreabundancia de revelación de la Luz del Creador. Esta es una oportunidad muy positiva, pero también es un tiempo para ser cuidadosos. El impacto total de la Fuerza de Luz del Creador es demasiada Luz, demasiado calor, lo que puede provocar todo tipo de destrucción.
“Tenemos que alentar una sobre-abundancia de compartir.”
El Rav ha dejado claro a menudo que, a lo largo de la historia, Capricornio ha influido en la gente de manera negativa. Esto se debe a que la gente ha sucumbido ante la intolerancia y el odio gratuito durante este mes. Quienes practican la intolerancia, no comparten y son egoístas, este es el mes en el que no hay nada que los detenga. No hay filtro que impida que la gente que está desconectada de la Luz traiga juicio a su propia vida.
En resumen, este es un mes muy importante porque si bien hay una gran oportunidad, al mismo tiempo hay un gran peligro. Cuando una enorme infusión de Luz llega a una Vasija que no está preparada —a una persona que no está lista para ella o que actúa sin dignidad humana o sin amor por otra persona—, dicha Luz crea un cortocircuito. Esa Luz causa negatividad.
¿Cómo podemos asegurarnos de que esta abundancia de Luz sea positiva? ¿Cómo podemos asegurarnos de que traiga bendiciones a nuestra vida? La respuesta está en nuestra propia conciencia y comportamiento.
En este mes debemos equilibrar la sobreabundancia de Luz con una sobreabundancia de dignidad humana por los demás. Tenemos que alentar una sobreabundancia de compartir. Debemos tener un amor abrumador por otras personas. De este modo podemos conectarnos con Capricornio de manera positiva y usar positivamente su sobreabundancia de Luz.