El Arí, Rav Yitsjak Luria, enseña que cada mes está conectado con una parte de la anatomía; este mes de Adar o Piscis está conectado con la nariz, el sentido del olfato. Pero ¿qué quiere decir exactamente con sentido del olfato?
En la historia del Jardín de Edén, dice que la caída de Adán y Eva ocurrió porque usaron sus sentidos —vista, oído, tacto, sabor— por motivos egoístas, por el Deseo de Recibir para Sí Mismo. Y si bien esos cuatro sentidos fueron perjudicados, no fue el caso del sentido del olfato. Por lo tanto, es el sentido más elevado, espiritual y celestial de todos.
"La Luz Infinita está en todo. "
La mayoría vivimos nuestra vida influidos por lo obvio, mientras que una persona verdaderamente elevada es alguien que puede recibir y percibir lo que es casi inexistente. Por ejemplo, si firmamos un trato de negocios, obviamente estaremos llenos de felicidad. Ahora bien, digamos que hay un vaso con agua cerca de nosotros; la misma Luz que sentimos cuando firmamos ese trato también existe en un sorbo de agua que estamos por beber, pero no lo sentimos. Al igual que la mayoría de la gente, nos sentimos mucho más felices después de firmar un increíble trato de negocios que al beber un sorbo de agua, pero no porque la esencia de la Luz y la energía contenida en el sorbo de agua y el trato de negocios sea diferente; más bien sucede porque solo podemos recibir y percibir a través de lo obvio.
Por consiguiente, el secreto del sentido del olfato es la capacidad de percibir y recibir lo menos obvio. Este mes de Piscis, dice el Arí, consiste en el sentido del olfato que debemos desarrollar, el cual no es natural en la mayoría de nosotros. En términos simples, lo que hace que una persona crezca espiritualmente es cuando necesita menos sucesos físicos para estar satisfecha, porque, en realidad, la Luz que existe en las cosas que nos hacen felices también existe en las cosas que nos hacen mucho menos felices. A nivel supremo, nos dicen que en el Final de la Corrección el sentido del olfato simplemente llenará a todas las personas con dicha, felicidad y sabiduría. Pero nuestros sentidos están menoscabados en la manera que vivimos hoy día.
La Luz Infinita está en todo. Cuando disfrutamos una comida, por ejemplo, cualquier dicha que obtengamos de esa comida es la misma que podemos experimentar con la silla en la que estamos sentados; porque la Luz Infinita está en esa silla al igual que en la comida. Pero todo tiene que ver con nuestro sentido espiritual, como lo llama el Arí: nuestro sentido del olfato. Y es importante entender que cada vez que actuamos con egoísmo, menoscabamos nuestros sentidos y necesitamos más cosas externas que nos emocionen y nos hagan felices. Por lo tanto, ¿cuál es el regalo del primer mes de Piscis? El olfato, la capacidad de comenzar a calibrar nuestro sentido espiritual.
"El mes de Piscis nos da la capacidad de comenzar a calibrar nuestro sentido espiritual."
En este mes, lo que podemos pedir —y lo que recibimos— es la capacidad de percibir la verdadera esencia de las cosas y recibir de ella. Los kabbalistas enseñan que el Guemar HaTikún, el Final de la Corrección, solo puede experimentarlo un individuo que haya desarrollado este sentido. Tal como mi padre, Rav Berg, siempre nos decía: la Luz del Final de la Corrección ya está aquí; solo que no podemos verla porque cada acción, conciencia, pensamiento y palabra del Deseo de Recibir para Sí Mismo cubre ese sentido.
Hay algunas personas que poseen lo que conocemos como “sexto sentido”, que pueden mirar, entender, sentir y conocer lo que otros no pueden. ¿Por qué? Porque su sentido espiritual, lo que nos entregan este mes, no está cubierto u oculto. Por lo tanto, al entrar en este mes de Piscis, podemos pedir la capacidad de ver, sentir y conocer lo que no se ve, no se siente y es desconocido por la mayoría. Ese sentido es despertado durante este período, y si tenemos este deseo y conciencia, y nos esforzamos en desarrollarlo, podemos comenzar a extraer dicha de las cosas de las que antes no podíamos y entender cosas que antes no podíamos entender.