¡Permítanme comenzar deseándoles un excelente año cósmico a todos, lleno de Luz, bendiciones y amor!
Al entrar ahora en el nuevo mes lunar de Escorpio, mucha de la maravillosa energía que recibimos durante las festividades será transferida a esta zona de tiempo con los pies muy puestos en la tierra (Maljut).
Curiosamente, Escorpio, uno de los tres signos de agua, ¡es el único que no tiene nada que ver con el agua! El símbolo de Piscis son dos peces nadando en agua dulce, Cáncer vive en el vasto océano y Escorpio… pues, técnicamente, vive en zonas desérticas. Hace muchos años le pregunté a nuestro maestro, Rav Berg, por qué Escorpio no tiene nada que ver con el agua. Él respondió con una sonrisa y dijo: “El agua está en el interior”.
La energía interna de Escorpio es FUEGO, no agua. Entonces, ¿dónde está el agua? Al estudiar minuciosamente la carta de este mes, tenemos una oportunidad para profundizar nuestro conocimiento de este tiempo complejo. Las palabras claves para este mes son acción y sensibilidad: sensibilidad activa, acción emocional y la inusual alianza entre la acción y un grado mayor de emoción.
Así pues, uno de los escorpio famosos en la Biblia fue el Rey David. La leyenda dice que tenía una estrella de David perfecta (dos grandes trígonos en oposición) en su carta natal. ¡Él decidió inscribir este signo de protección en su escudo de combate para que sus numerosos enemigos supieran que tenían que apartarse de su camino! Se dice que uno de estos trígonos estaba en los signos de agua y el otro en los signos de fuego, lo cual marcaba un perfecto flujo universal.
Escorpio lunar es la alianza inusual entre el fuego y el agua, dos fuerzas opuestas que trabajan conjuntamente por la misma meta. Al entrar en esta zona de tiempo, podemos acceder a un nivel diferente de conciencia, activar un “nuevo yo”, una versión valiente y apasionada de nosotros mismos acompañada de sensibilidad e intuición. ¿De qué podríamos quejarnos? En cierto modo, la carta de este mes nos libera de las cargas innecesarias, Nos eleva y nos mantiene con los pies en la tierra al mismo tiempo. Una contradicción, ¡al igual que este mes!
Entonces, ¿en qué debemos enfocarnos en este tiempo? Primero que nada, centrémonos en la manifestación de proyectos y creación de equipos. Hay un énfasis en la zona oeste de la carta, el ámbito de los demás, el dinero colectivo y las alianzas de todo tipo. En términos prácticos, si perteneces a un equipo, piensa en cómo puedes unir más a la gente. Si trabajas con dinero para una compañía, asegúrate de no hacerlo solo; por el contrario, incluye a otras personas en tu éxito y desarrolla el autoestima de los demás también. Debes estar atento a terminar lo que inicies, ya que la carta de este mes facilita la comunicación, pero no siempre cierra todos tratos debido al ascendente en Géminis y la abundancia de planetas de aire. ¡Asegúrate de no dejar cabos sueltos!
Por último, hay una nota de claridad, adaptabilidad y entendimiento este año que no siempre está presente en un Escorpio lunar “normal”. Nuestra segunda tarea es asegurarnos de no estancarnos en nuestras creencias, sino más bien abrirnos a la opinión y puntos de vista de los demás.
La cualidad principal del guerrero, el Rey David, no era solo su fuerza y certeza, sino también el respeto que lograba inspirar en sus tropas, su sensibilidad con los demás y su misticismo, tal y como vemos en los salmos que escribió que aún hoy continuamos leyendo.
Así como Rav Berg nos enseñó: las aguas de Escorpio están dentro, con cada acción que realices este mes podría haber un mayor grado de sensibilidad por los demás, una intuición más fuerte y una conexión más profunda con el panorama completo y el bien común.