Todos hemos vivido momentos en los que pareciera que el Universo nos está diciendo algo. Un desconocido hace un comentario que enciende una bombilla en nuestra mente, o una canción en la radio nos da la respuesta que hemos estado buscando desesperadamente. Algunos creen que encontrar mensajes en lugares aleatorios es simplemente un efecto secundario de nuestro deseo humano de buscar orden y encontrar patrones donde en realidad no existen. ¿Acaso estos eventos tienen significado, o son tan solo derivados de nuestro instinto de hallar sentido dentro del caos? La respuesta depende de cómo vivas tu vida y dónde esté tu conciencia.
Las señales y los mensajes son un derivado de una comprensión más profunda de la vida. Podemos elegir encontrar sentido en los mensajes que el Universo nos está enviando o descartarlos como coincidencias aleatorias. Pero si los ignoramos, puede llevarnos a cometer errores y perder oportunidades para transformar nuestra vida de formas poderosas.
He aquí tres consejos para escuchar y descifrar mensajes del Universo:
1. Mantente abierto a recibir mensajes de todas las direcciones y confía en que el Universo te apoya.
Si quieres recibir orientación y señales del Universo, primero debes aceptar que te están enviando tales mensajes todo el tiempo. El Universo te apoya, y parte de ese apoyo es a través de las señales que constantemente llegan a ti. Cuanto más te abras a esta idea, más probable será que veas las señales y las entiendas correctamente. El simple hecho de pensar que todo tiene un propósito comienza a cambiar nuestra conciencia de formas que ni siquiera reconocemos.
Absolutamente todo lo que sucede en nuestra vida, todo lo que vemos en la televisión y cada persona que nos dice algo contiene un mensaje. No significa que tengas que descifrar o entender todo, pero puedes vivir sabiendo que las señales siempre están ahí cuando las necesitas. Vivir con esta mentalidad te permite comenzar a ver los mensajes cada vez con más claridad.
Por un día, prueba ver todo como algo con un propósito. Es probable que comiences a notar señales que normalmente habrías pasado por alto. Si te funciona, comienza a incorporar esta práctica todos los días.
2. Dedica tiempo a la quietud y el silencio. Es ahí cuando llegan los mensajes más profundos.
Todos tenemos la capacidad de ver las señales que nos rodean, pero la mayoría de nosotros no las vemos porque estamos demasiado ocupados con nuestra vida cotidiana. Lidiar con el trabajo, comunicarnos con amigos y familiares, devolver llamadas telefónicas, planificar comidas y, especialmente, ser consumido por los pensamientos negativos que nos agobian. Vivimos en un mundo muy ruidoso. No solo los sonidos del tráfico y las calles abarrotadas, sino el ruido de los miedos, las dudas y las inseguridades que nos distraen.
Si quieres acceder a la voz del Creador, permite la quietud y el silencio. Dedica tiempo a sentarte y reflexionar con la mente despejada, libre de distracciones, en especial después de momentos de caos o dificultades. Ese silencio es donde podemos obtener los mensajes más profundos y aprender más sobre nuestro mundo, nosotros mismos y los demás. Si quieres recibir los mensajes del Universo, haz silencio para que puedas escucharlos. Escucha el susurro en medio del caos.
3. Sé auténtico contigo mismo. Cuanto más en contacto estés con tu alma, mejor podrás interpretar los mensajes que estás recibiendo.
Si bien todo lo que vivimos tiene un mensaje para nosotros, no todo lo que todos nos cuentan es verdad. A veces podemos tener dificultades para saber qué dirección nos señalan los mensajes. Descifrar el significado del mensaje es una habilidad que debe desarrollarse, y comienza por ponerse en contacto con la parte más genuina de nosotros: el alma.
La sabiduría de la Kabbalah enseña que ya tenemos todos los mensajes que necesitamos en nuestro interior; tan solo necesitamos poder acceder a ellos. Esto requiere dedicar tiempo, esfuerzo y energía a desarrollar el aspecto de nosotros mismos que todo lo sabe: nuestra alma. Es importante que cada uno de nosotros haga el trabajo interno necesario para despejar su propio camino. Un termómetro roto no puede darnos la temperatura correcta, ni nuestra intuición puede guiarnos de manera efectiva a menos que estemos alineados con nuestro propósito supremo.
Tu alma sabe más de lo que tú puedes reconocer. Cuando te llegas a conocer, puedes confiar en ti mismo. Vacilar socava el poder de los mensajes que el universo te envía constantemente. Presta atención a los mensajes de la conexión de mente, cuerpo y espíritu. Cuanto más sincero seas contigo mismo y más aprendas a confiar en ti mismo, más fácil será determinar qué debes escuchar, sin importar qué sea o de quién venga.
El Universo nos envía mensajes constantemente. Podemos elegir verlos como eventos fortuitos o podemos encontrar sentido en todo lo que se nos presenta. Ver las señales no es solo una buena adición a la vida, sino una base importante para nuestra máxima plenitud. Mantente abierto a los mensajes, dedica tiempo para escucharlos y entra en contacto con la parte más auténtica de ti mismo, y encontrarás sentido, respuestas y orientación en lugares que nunca esperabas.