La motivación de los espías
Menú principal

Eventos y clases


Hazte Miembro

Encuentra más sabiduría y ejercicios para elevarte, elevar tu vida y la de aquellos que te rodean. Desde artículos y videos semanales a clases trasmitidas en vivo, clases presenciales y eventos. Hay un plan de membresía para cada persona.

Ver planes de membresía
Membresía sugerida:

Comunidad Onehouse Premium

  • Sus beneficios incluyen:
  • Únete a webinarios interactivos cada semana
  • Ve cursos completos bajo demanda
  • Disfruta descuentos en eventos, sesiones de orientación y productos*
  • Y mucho más...
  • Inscríbete hoy
  • *En las sedes participantes. Hay restricciones.

Profundiza aún más en la sabiduría de la Kabbalah con una guía personalizada y lectura de carta astral.

Consulta gratuita

Nuestro equipo dedicado está aquí para ayudarte a transitar tu viaje espiritual.

Solicita la tuya

Lectura astrológica kabbalística

Aprender acerca de nuestra alma a través de una carta astral ayuda a dar más significado y un mayor entendimiento a las experiencias que enfrentamos, las personas que conocemos, el trabajo que hacemos y las bifurcaciones en el camino.

Solicita la lectura de tu carta

Guía personal - Servicios del Centro de Kabbalah

Sesiones personalizadas individuales con un instructor para profundizar en el área que te interesa o apoyarte donde más lo necesitas. Las reuniones abarcan temas desde las relaciones hasta el tikún o un estudio profundo del Zóhar, todas personalizadas especialmente para ti.

Reserva una sesión de guía

La motivación de los espías

Michael Berg
Junio 23, 2024
Me gusta 48 Comentarios 9 Compartir

Este artículo fue publicado originalmente en 2017.

Al inicio de la porción de Shlaj Lejá, Moshé envía, “por la boca del Creador”, los doce espías a Israel. Rashi, el gran kabbalista y comentarista, dice que estos espías, especialmente los diez que cayeron, eran hombres de altura. En el momento que fueron elegidos para ir, eran personas muy importantes y elevadas en términos espirituales. Estaban en un estado espiritual perfecto.

Después está escrito que los espías fueron y regresaron a Moshé y a Aharón. Rashi pregunta por qué está escrito, en la misma línea, que fueron y regresaron. La respuesta, nos dice, es para que quedara claro que su conciencia al momento de la ida era la misma que cuando regresaron.

Como ya sabemos, su conciencia al regresar fue negativa; por lo tanto, Rashi dice que también fueron con negatividad.

Sin embargo, es confuso porque Rashi dice que estaban en un estado espiritual perfecto cuando fueron enviados. Pero también dice que cuando iban su conciencia ya era negativa. Entonces, ¿cuál es la verdad? Una persona no puede tener una conciencia perfecta y una negativa al mismo tiempo. ¿Por qué parece que Rashi dice que al mismo tiempo iban con una conciencia perfecta y una negativa? El gran Kabbalista el Maharal de Praga explica esta contradicción con una enseñanza muy importante.

El Maharal comenta que cuando dice que fueron enviados estaban en una conciencia espiritual y estado espiritual perfectos, pero una vez que fueron enviados, no sólo eran mensajeros de Moshé y el Creador, sino también mensajeros del pueblo. Y quisieran ellos o no, al volverse mensajeros del pueblo, estaban bajo la influencia del pueblo. Sabiéndolo o no, su conciencia comenzó a deteriorarse en el momento en el que asumieron que eran mensajeros del pueblo.

Los espías se preguntaban una cosa. ¿Cuál era su motivación? ¿Por qué hacían eso? ¿Por qué iban a la tierra de Israel? ¿Fueron porque el Creador o porque Moshé los envió? ¿O fueron porque los israelitas los enviaron? Algunos se preguntarán qué diferencia había sobre quien los había enviado si lo que estaban haciendo era lo correcto, pero el Maharal dice que todo gira en torno a la motivación de los espías.

Aunque los espías sabían que habían sido enviados por Moshé y el Creador, también tenían presente en su conciencia que habían sido enviados por los israelitas; por lo tanto, su deseo no era hacer sólo lo que el Creador y Moshé querían que hicieran en este proceso, sino que también incluía el pensamiento de que todos sus amigos, vecinos y familiares querían que fueran y regresaran para que contaran qué ocurría allá. Los espías agregaron a su motivación lo que todos querían y, por consiguiente, de inmediato comenzaron a deteriorarse espiritualmente.

De esto aprendemos que aunque queramos o no, aunque decidamos aceptarlo o no, adoptamos el estado espiritual de todo aquel que nos motiva. Y no siempre ocurre necesariamente en un momento; en este caso, tomó cuarenta días para que ocurriera el deterioro completo. Pero una vez que los espías aceptaron su motivación como parcialmente originada en el hecho de que el resto de los israelitas también quería saber qué ocurría en esa tierra, se volvieron como los israelitas. En ese punto, los espías ya no podían controlar aquello en lo que se habían convertido. Porque nos convertimos en quienes nos motivan.

El momento en el que los espías fueron designados, cuando Moshé se acercó a decirles que tenían una importante tarea que cumplir, ellos eran perfectos, porque quienes los enviaron —el Creador y Moshé— eran perfectos. Pero luego sus amigos comenzaron a decirles a los espías que estaban felices de que iban porque ellos también querían saber. Luego, la motivación de los espías también se convirtió en satisfacer el deseo de todos los demás. Así pues, adoptaron la conciencia de todos los demás.

Después, dice el Maharal, los espías se volvieron negativos. Porque, en todos nosotros, si somos motivados por la negatividad, si somos motivados por una persona imperfecta, entonces desde un comienzo somos imperfectos, incluso si éramos perfectos antes de eso. Y esto es increíble, porque no podemos siquiera imaginarnos el estado de perfección espiritual en el que estaban los espías. Eran completamente perfectos, completamente justos, y cuando Moshé les dijo que el Creador quería que hicieran esta tarea, continuaban siendo perfectos y emocionados por hacerla.

Pero luego también escucharon que el resto de israelitas también quería que fueran y los espías dijeron que también harían eso por ellos. Y al tener la motivación de también satisfacer el deseo de los israelitas, tuvieron que volverse negativos. Su conciencia, su conexión, comenzó a deteriorarse en ese momento. Por eso es que podemos decir que la conciencia de los espías al momento de ir también estuvo un estado negativo. Moshé los designa, son perfectos. El Creador los designa, son perfectos. Los israelitas también quieren que vayan y los espías aceptan esa motivación, por lo tanto, se vuelven imperfectos y comienzan su proceso de deterioro.

Todo el tiempo hablamos de conciencia, pero no creo que alguno de nosotros aprecie realmente su verdadero poder. Cuando hacemos algo, sabemos que la conciencia es importante como un factor adicional a la acción, pero aquí vemos algo completamente diferente. La persona que realiza la acción puede ser perfecta. No obstante, si hay una mínima incorporación en lo que motivó a esa persona a hacer esa acción perfecta, no sólo la destruye, sino que la vuelve completamente negativa y sólo provoca muerte y destrucción.

Piénsalo por un instante. Sin importar lo que hayamos pensado sobre el poder de la conciencia, espero que a partir de esto, podamos comenzar a cambiar. Esperemos que con esta enseñanza ahora podamos llegar a un entendimiento más profundo. Las acciones son sólo una herramienta de la conciencia; nunca se trata de la acción. A veces, debido a que vivimos en el mundo físico, necesitamos herramientas, necesitamos acciones para ayudarnos a elevar la conciencia. Pero sólo consiste en conciencia, tal y como vemos aquí. Estas personas perfectas, elegidas por el Creador y Moshé, estaban haciendo una tarea perfecta. Pero el hecho de agregar esta pequeña motivación originada en lo que deseaban los israelitas destruyó a los espías, a la acción, y trajo muerte y destrucción. Este es un maravilloso entendimiento.


Comentarios 9