Nuestro llamado supremo

Bienvenidos a la Luna Nueva de Acuario. Entramos a un extraordinario período de tiempo en el que nos conectamos más fácilmente con el pensamiento Divino y con los principales ideales del Creador. Esta es la Era de Acuario. La humanidad está muy cerca de cumplir su propósito. Es un período de sorprendentes avances, descubrimientos médicos y tecnologías que nunca consideramos posibles. Durante el mes de Acuario nos podemos conectar con un nivel de conciencia más alto. Este mes puede funcionar como una llamada de atención espiritual para la humanidad ya que no siempre tenemos al frente de nuestros pensamientos un mundo en el que solo haya paz, amor y armonía. La vida está llena de distracciones que pueden impedir que creamos en un mundo utópico. Podemos olvidar que el mundo tiene una misión. Nosotros los humanos tenemos un propósito más grande que va más allá de simplemente despertarnos cada día para ir a trabajar y regresar a casa para dormir cada noche. Nuestra meta es nada más y nada menos que conectarnos con nuestra Chispa Divina interior y crear un mundo en el que el amor impregne cada fibra de la existencia y el odio sea desterrado para siempre. Este es nuestro principal y más elevado llamado. Durante este mes de Acuario percibimos esto y somos capaces de ganar terreno para alcanzarlo. El Amor Divino ya está en nuestro corazón. Tal y como escribió John Lennon: “La guerra terminó, si tú quieres”.

"La humanidad está muy cerca de cumplir su propósito."

El símbolo de Acuario es el portador del agua. Muestra una figura que vierte agua sin ningún límite, provee y nutre ilimitadamente. Esta imagen nos señala la realidad posible en la que todo es dado a todos sin lucha ni precio. Un mundo utópico de amor, paz y plenitud. Esta es la conciencia que buscamos entender este mes. El primer paso para materializar algo es visualizarlo en nuestra mente primero. Si no lo podemos ver primero allí, entonces hay poca esperanza de que lo manifestemos. El constructor esboza los diseños en planos. Pero antes de que los diseños lleguen a la mesa, el constructor primero debe visualizar en su mente el resultado final. El mes de Acuario ofrece los planos más majestuosos a la humanidad. Este estímulo de conciencia es enviado a nosotros por el Creador para que recordemos todo lo que es posible. Las dificultades, los desafíos y el dolor de la vida pueden hacer que perdamos nuestra inspiración y pasión por luchar por lo mejor en nuestra vida. Sin la ayuda del mes de Acuario para expandir nuestra mente y corazón, quizá no podríamos creer que un mundo de paz y amor totales es posible. A menudo pensamos a muy pequeña escala, pero podemos contar con este mes para ver grandes ideas y que nos recuerde el plan del Creador para nuestro mundo. No nacimos para sufrir. No nacimos para estar hambrientos. El odio y el miedo no están predeterminados en la humanidad. El amor está allí, siempre lo ha estado. Este mes despertamos a nuestro niño amoroso interior y cumplimos la promesa que nos hicimos y le hicimos al Creador: un mundo de paz y amor.

Nuestros amigos nacidos bajo el signo de Acuario también nos ayudan a recordar que nunca nos conformemos con poco. Los acuarianos nos instruyen con pensamiento justo. Ellos tienen el don de rebelarse contra la norma y adoptar la corriente contraria. Son nuestros innovadores y manifiestan nuevos conceptos e ideas. Los acuarianos aman ser diferentes y detestan conformarse. Viven para romper la estructura y prosperan gracias a la libertad. En una vida en la que la depresión y la tristeza abundan, los acuarianos rechazan formar parte de ella. Crean un nuevo camino. Luchan por el amor y la paz. Desean dar y compartir. Se rebelan contra el odio y parecen conectarse automáticamente con la chispa del Creador interior. Nuestros amigos acuarianos nos permiten recordar la verdad de nuestra existencia. No nacimos para pelear, nacimos para amar. Nacimos para trabajar en sinergia y armonía con los demás.

"El amor está allí, siempre lo ha estado."

Hay una parábola sobre un mundo de gente que había sido maldecida con brazos que no se podían flexionar. Como resultado, no podían comer por sí solos y muchos murieron de hambre. No podían cuidar de sí mismos de ningún modo. La gente sufría y vivía una vida muy difícil. Sin embargo, en este mismo mundo, al otro lado del planeta, ocurría algo totalmente diferente. También había gente con brazos que no se flexionaban, pero lograban vivir sanos y saciados sin ningún problema. ¿Cuál era su secreto? Ellos aprendieron que la solución a sus problemas estaba en alimentarse unos a otros. Quizá no podían alimentarse por sí mismos, pero fácilmente podían alimentar y cuidar a alguien más. Crearon salud, paz y armonía a través de la hermandad. Cuando pensaban en la otra persona podían resolver sus propios problemas y crear una existencia bendita.

En un mundo de tanta oscuridad, en este mes de Acuario nos muestran la Luz hacia un mejor camino. Se nos muestra una lógica y orden superiores. Se nos recuerda nuestro llamado y propósito supremos en este mundo. El amor es la respuesta y siempre ha sido nuestro llamado supremo. Es la respuesta que hemos estado esperando y buscando. Amar a nuestro prójimo es el secreto para crear el Cielo en la Tierra. La Era de Acuario está aquí. Somos llamados a aceptar y liberar al niño amoroso interior. Vinimos a este mundo por amor, y es con amor que alcanzaremos la meta de la humanidad: paz en la tierra y benevolencia para todos. Deseo que todos tengamos esta visión superior y revelemos el amor del Creador que ya está en nuestro interior. Que tengas un mes lleno de bendiciones.