Al estudiar la sabiduría de la Kabbalah, aprendemos que cualquier desconexión de la Luz del Creador produce oscuridad, una oscuridad que provoca caos y destrucción. Cuando nos preguntamos qué nos aleja de la Luz, solemos pensar en acciones negativas, pero olvidamos que hay otra causa problemática: la complacencia.
El Zóhar dice en la porción Behaalotjá (párrafo 88) que “El Zóhar es el Arca de Noé donde se reúnen dos de una ciudad, siete de un reino y, a veces, uno de una ciudad y dos de una familia... ”.
Así pues, si el Zóhar es como el Arca de Noé, cualquiera que posea el Zóhar es como un Noé y, por ello, tendría la responsabilidad de salvar al mundo de la inundación de caos que agobia a tanta gente.
El Midrash (acompañante oral de la Torá) dice que cuando Noé salió del Arca y vio que el mundo entero había muerto, le gritó al Creador, “¿Cómo pudiste hacerlo?” y el Creador respondió “¿Y ahora me preguntas? ¿Por qué no despertaste antes de que fuera tan tarde?”.
Como estudiantes de Kabbalah debemos preguntarnos constantemente si estamos haciendo todo lo que podemos para revelar Luz y contrarrestar el caos en este mundo. Cuando somos complacientes, permitimos que la oscuridad se propague en nosotros y en el mundo. Cuando finalmente nos despertamos y nos quitamos la venda de los ojos frente a la negatividad que hemos provocado, nos damos cuenta de que todo el dolor y sufrimiento vivido no tenía por qué haber ocurrido. Si somos fieles a nuestro camino espiritual, identificaremos y estaremos más atentos a la negatividad antes de que se manifieste.
El Rav Abraham Azulai, el gran kabbalista del siglo 16, nos dice en su libro Jésed LeAvraham (Primavera 1, Rio 24): “Quien tenga la dicha de conectarse con el Zóhar, vivirá el fin del dolor y el sufrimiento, porque ese pequeño trabajo (escanear y propagar el Zóhar), actualmente, es más importante que la gran cantidad de bendiciones que han sido traídas a este mundo hasta ahora”.
Según los kabbalistas, el estudio y difusión del Zóhar es la manera más importante y efectiva de cancelar la negatividad y revelar Luz en el mundo. Cada Zóhar posee una poderosa energía que se va desbloqueando a medida que lo escaneamos, leemos y estudiamos. Una energía que beneficia a todas las personas, aunque estudien Kabbalah o no.
Debemos aprender de la historia de Noé y entender nuestro poder. Como poseedores del Zóhar, debemos sentir la necesidad de montar en el Arca (el Zóhar) a todo el que queremos salvar de la inundación de caos. Debemos combatir a nuestra complacencia todos los días, sabiendo que al hacerlo estamos contrarrestando oscuridad y revelando Luz. Al escanear, estudiar y difundir el Zóhar, tenemos el poder de terminar con el dolor y sufrimiento en todo el mundo de manera misericordiosa.