Este artículo fue publicado originalmente en 2016.
Hay una conexión que era llamada el Sacrificio de Pésaj en la que una persona impura no podía participar; esto significa que la persona no podía haber estado cerca de un cadáver, por ejemplo, o haber hecho otra cosa que la haya vuelto impura. En la porción de Behaalotjá se habla de las personas que cargaron el cuerpo de Yosef por el desierto. Estas personas se acercaron a Moshé y le preguntaron, aunque sabían que estaban impuras debido a que cargaron el cuerpo de Yosef, por qué tenían que perder la oportunidad y la elevación espiritual que se obtiene con la conexión de Pésaj.
Muchos de los comentaristas dicen que la pregunta es extraña porque estas personas conocían las reglas. Las reglas dicen que si una persona se vuelve impura debido a un cadáver, no puede formar parte de la conexión. Entonces, ¿por qué le hacen esta pregunta a Moshé? ¿Qué puede hacer él? Es como acercarse a alguien y decirle: “Quiero saltar desde un piso 30, pero no me quiero lastimar”. Todos sabemos que eso no es posible. Hay una regla que dice que si saltas desde un piso 30, te lastimarás. Las reglas son claras.
Aprendemos una enseñanza muy importante a partir de lo que ellos le preguntan a Moshé. Ellos conocían el poder del deseo, que cuando una persona realmente tiene el deseo de conectarse con la Luz del Creador, incluso cuando las reglas dicen que no deben o no pueden, ese deseo abre un nuevo camino. Eso significa que ellos entendían que existe un rumbo natural de las cosas y hay leyes y reglas aplicables a la conexión espiritual de una persona y su crecimiento espiritual, pero también sabían que por encima de todo eso, cuando una persona logra despertar un verdadero y profundo deseo, puede encontrar un camino que no existía antes.
Hay un camino común de trabajo, estudio y desarrollo espiritual que puede elevar una persona a determinado nivel. Hay momentos en la vida en los que nos encontramos en una posición en la que queremos ascender más alto de lo que es naturalmente posible o estamos en lo profundo preguntando cómo ascender más rápido. Queremos saber cómo ir más allá de las reglas. Y lo que le decían a Moshé era que debe haber un modo, con deseo, de crear un nuevo camino, ir más allá de las reglas. Por ejemplo, si el camino natural toma diez años, buscamos crear un camino más corto que sea un atajo, que nos tome un año o seis meses; el deseo de conectarnos con la Luz del Creador tiene el poder de crear atajos y nuevos caminos para alcanzar esa conexión. Aunque ellos sabían que eran impuros y, por lo tanto, no tenían la capacidad natural de conectarse, su necesidad desesperada de conectarse creó nuevos caminos.
Así pues, Moshé se dirigió a ellos y les dijo que el Creador había dicho que hay un nuevo camino. Este nuevo camino no existía antes de estas personas, fue creado por su deseo de conectarse con la Luz del Creador. A partir de esto, podemos aprender que cuando nos encontramos en un lugar distante de la Luz del Creador, tenemos que saber que tenemos la capacidad de crear un nuevo camino de conexión desde donde nos encontremos. Estamos conscientes del camino natural de las cosas, la manera de ir desde donde estamos hasta donde debemos llegar. Sabemos que nos tomará años y un determinado proceso, pero hay momentos en los que podemos despertar suficiente deseo, teniendo presente que cada uno de nosotros puede crear un camino que no existía antes.
No importa en donde estemos, podemos crear un nuevo y más corto camino hacia una conexión con la Luz del Creador. Podemos crearlo con gran cantidad de deseo despertado, mantenido y profundizado. Podemos atraer a nosotros Luz que antes no existía, crear un nuevo camino y, a través de él, regresar al camino que nos conecta directamente con la Luz del Creador. Este es un entendimiento muy importante porque, ya sea que pensemos con esta claridad o no, la mayoría de nosotros entiende cómo funciona la lógica espiritual y el camino espiritual, que para ir del punto A al punto B hace falta determinada cantidad de tiempo y esfuerzo. Y si nos desviamos, si nos salimos del camino, regresar a él nos tomará la misma cantidad de tiempo que duramos fuera de él.
Sin embargo, este Shabat y esta conciencia consisten en entender que cada individuo, sin importar en dónde esté, tiene la capacidad de, a través de mucho deseo y anhelo, crear un nuevo camino de conexión que lo lleve rápidamente (más allá de lo natural) a una conexión fuerte y profunda con la Luz del Creador. Una conexión que no es natural, que no es como debería ser, ni tampoco es. Pero con anhelo y deseo profundo de conexión con la Luz del Creador, creamos un nuevo camino que nos lleva de regreso a una conexión fuerte y profunda con la Luz del Creador.
Esto también aplica para quienes hemos estado en el camino equivocado y decidimos que queremos estar en el correcto. En lugar de pensar en cómo cambiaremos o transformaremos acciones negativas que hemos hecho, debemos actuar, es decir, despertar el deseo y anhelo por una verdadera conexión con la Luz del Creador; y luego toda la suciedad del camino equivocado se caerá por sí sola. No necesitamos esperar hasta la limpieza de la suciedad y el camino negativo. Es más importante despertar el anhelo y el deseo por el camino correcto rápidamente, saber que esto crea un nuevo camino.
A la mayoría de nosotros nos ocurre que el Lado Negativo se nos acerca y nos dice que hay un largo camino desde donde estamos hasta donde debemos ir para obtener una verdadera conexión con el Creador. Sin embargo, hay otro camino y de eso se trata este Shabat; no queremos el camino largo, el camino que fue creado por algunas de las cosas negativas que hemos hecho. Queremos un nuevo camino, rápido. Ese pensamiento de anhelo y deseo o, como Rav Áshlag lo llama, el anhelo por devekut, el anhelo por la conexión de nuestra alma con la Luz del Creador, crea un nuevo camino directo y más rápido desde donde estemos hacia la Luz del Creador. Un pensamiento extremadamente inspirador y necesario.