Este artículo de la porción semanal fue publicado originalmente en 2019.
Hay ciertos Shabats que reciben un nombre, y el Shabat de la porción Vaetjanán es uno de ellos. Usualmente estos nombres se refieren a la lectura de la Torá de esa porción; no obstante, el Shabat de Vaetjanán, llamado Shabat Najamú, tiene relación con su porción de la Haftará de la lectura del Profeta Yeshayahu (Isaías). El nombre proviene de las palabras de apertura: Najamú, najamú amí, “Consuelen, consuelen a Mi pueblo”.
"¿Qué quiere decir Yeshayahu cuando dice que el pueblo está seco?"
Yeshayahu dice en su profecía que el pueblo está seco y que incluso las bondades que se hacen en este mundo son como hierbas secas que crecen. Rav Áshlag y Rav Brandwein señalan, y el Zóhar explica, que este en realidad es el secreto de la barrera entre el mundo como lo conocemos hoy, con el dolor, el sufrimiento y la muerte que existen, y la manera en la que debería ser. Pero ¿qué significa eso? El Zóhar pregunta: ¿qué quiere decir Yeshayahu cuando dice que el pueblo está seco y su bondad, sus acciones de compartir, estan secas?
Para explicar esto, el Zóhar profundiza mucho, pero hay una sección que quisiera compartir. En su libro El Pensamiento de la Creación, Rav Áshlag escribe, citando esta parte del Zóhar, que cuando dice que el pueblo está seco y su bondad está seca, significa que cuando las personas hacen acciones bondadosas lo hacen por su propio beneficio personal, ya sea físico o espiritual. Y el Zóhar y Rav Áshlag nos dicen que para poder traer al mundo el cambio que deseamos y que el Creador desea para nosotros, tenemos que cambiar eso. Tenemos que pensar sobre nuestra propia bondad y responder sinceramente: cuando damos o compartimos, ¿cuánto de ello es puro? ¿Cuánto es solo por el propósito de revelar la Luz del Creador en este mundo, sin ninguna aspiración a beneficio personal?
"Cuando damos o compartimos, ¿cuánto de ello es puro?"
Ciertamente, en la Kabbalah aprendemos que realizar una acción dadora puede traernos bendiciones, y es importante hacerlas. Pero esa no es la conciencia óptima. ¿Acaso solo el 20 % o el 30 % de nuestras acciones bondadosas son puras? ¿Las realizamos únicamente con el propósito de revelar la Luz del Creador en este mundo, sin ningún deseo de bendiciones y beneficios personales? En la medida que no sean puras, la profecía de Yeshayahu sigue siendo cierta; la gente permanece seca y la bondad, las acciones de compartir, no tienen el poder que deberían tener. Y dice que mientras ese sea el caso, no podemos atraer ni conservar la Luz del Final de la Corrección.
La Luz está disponible para todos nosotros en Shabat Najamú, el Shabat de la porción Vaetjanán, para ser alguien que verdaderamente comparta sin aspirar a recibir ningún beneficio personal a cambio. Esa es la Luz que está disponible en Shabat Najamú, y ese cambio, nos dice el Zóhar, es lo que permitirá el comienzo de la manifestación de la profecía de Yeshayahu: Najamú, najamú amí, “Consuelen, consuelen a Mi pueblo”, en la que todo el dolor, las lágrimas y la muerte que hayan existido sean eliminados de nuestro mundo. Si lo pedimos en este Shabat, podemos comenzar a avanzar en esa dirección.