La porción de esta semana comienza con la palabra "Reé", que significa "Miren". El primer verso continúa, “Pongo frente a ustedes una bendición y una maldición”.
¿De verdad sabemos qué son benciones y qué son maldiciones en nuestra vida? ¿Qué estamos haciendo bien y qué estamos haciendo mal? ¿A quién hemos herido en el pasado y a quién herimos cuando hablamos? ¿Cuándo fue la última vez que le preguntamos a alguien (amigo o familia), "¿Por favor puedes decirme qué estoy haciendo mal en mi vida?"?
Todos sabemos que no somos perfectos y nos sentimos bien admitiéndolo, pero cuando alguien trata de decirnos qué estamos haciendo mal, nos ponemos a la defensiva. Un sabio maestro dijo una vez que sólo alguien que te ama, te dirá qué estás haciendo mal. Es una gran bendición estar abiertos a escuchar esas opiniones y reconocer cómo afectan nuestras vidas.
Rav Áshlag escribe en su libro, The Wisdom of Truth (en inglés), que la diferencia entre una persona espiritual y otra que no lo es, es la habilidad de ver nuestra negatividad y ver qué está mal con nosotros. Mientras más vemos, más podemos cambiar.
Este Shabat ayuda a que comience el gran evento de la semana que viene: el viaje hacia el mes de Virgo que nos lleva a Rosh Hashaná. La habilidad de ver qué es verdaderamente una bendición en nuestras vidas y qué necesitamos cambiar es el mayor regalo que podemos pedir para este Shabat. Ya que el mes de Virgo nos da muchas oportunidades para ver qué tenemos que cambiar o mejorar. Este Shabat nos da la fuerza para ver en nuestras almas qué es una bendición y qué es una maldición.
Reé es también uno de los 72 nombres de Dios, el número 69: "Perdido y encontrado" cuando quieres encontrar el camino de regreso a casa. Esta es la única vez en la Torá en la que el nombre de la porción nos conecta con uno de los nombres de Dios. Con este nombre como tu brújula, el camino hacia tu hogar espiritual es iluminado. Recuperas tu rumbo. Con cada paso que das y con cada momento que pasa, sientes comodidad, seguridad y un sentido más fuerte de dirección.
Este Shabat, mientras escuchamos la lectura y nos conectamos a la energía de la semana, debemos pedir ser capaces de usar nuestros ojos de manera espiritual, no para juzgar, sino para tener compasión.
Abre los ojos al mensaje que el universo enviará en el mes de Virgo guiándote hacia lo que tienes que cambiar para que Rosh Hashaná sea el comienzo de un gran y maravilloso año en tu vida.