Bajo la influencia de Capricornio, podemos mantener el sistema de creencias de que nuestro valor se deriva de nuestra habilidad de ser exitosos en lo que sea que hagamos. No es sorprendente que el lema de Capricornio sea "Yo utilizo, y luego existo". Esta creencia nos lleva a poner al mundo en nuestros hombros, asumiendo responsabilidades incluso en situaciones donde no las tenemos que asumir. Debido a que esta creencia no puede llenar de plenitud a nuestra alma de ninguna manera, nos convertimos en víctimas de nosotros mismos, andando con un sentimiento constante de carencia y limitación.
Hoy tenemos la oportunidad de sacar de raíz este sistema de creencias y así cambiar nuestras experiencias. Hacer esto nos permite ir de vuelta a la unificación con la Fuente, pues al entender que somos exitosos, sin importar nada, porque somos una chispa de Dios que ha recibido el don de la habilidad de cultivar una relación con la Luz que tenemos dentro y la gente a nuestro alrededor.
Antes de comenzar el ejercicio de limpieza, tómate un momento para reconocer si esto está en tu vida y de qué manera, y recuerda que puedes cambiar aquello que reconoces:
1. Reconoce que eres 100% responsable de todo lo que ocurre en tu vida.
2. Pídele al Creador que te ayude en este proceso.
3. Medita en las letras Vav Hei Vav para “viajar en el tiempo” y desarraigar la creencia de que tu valor se deriva de tu habilidad de ser exitoso.
4. Medita en las letras Hei Hei Ain de amor incondicional. Imbúyete con el amor que fluye del Creador a través de todo el universo.
5. Agradécele al Creador por permitirte realizar este proceso.
Puedes repetir este ejercicio cuantas veces quieras o necesites durante el día, especialmente si te encuentras en una situación en la que estás reaccionando como un Capricornio.