¡Este año recibimos el nuevo mes lunar de Tevet, o Capricornio, casi al mismo tiempo que el año nuevo gregoriano 2020! Aunque los dos primeros días están iluminados por la energía de Janucá, la fiesta de las luces, el mes lunar de Tevet suele asociarse con tiempos difíciles y pesados. En términos kabbalísticos, es considerado como uno de los tres meses más negativos del año. Desde luego, su regente es el rígido Saturno, Shabtái en hebreo, el séptimo planeta de nuestro sistema solar que rige las leyes, el orden y las limitaciones.
"Permitir que el cosmos irradie bendiciones sobre toda la humanidad".
Estudiemos lo que el Libro de la Formación, o Séfer Yetsirá (la obra kabbalística escrita más antigua) tiene que decir acerca de Capricornio.
Él hizo a la letra Ayin reinar sobre la ira.
Y le ciñó una corona
y la combinó con otra,
y con ellas Él formó
a Capricornio en el universo,
a Tevet en el año
y al hígado en el alma,
masculina y femenina.
La letra aramea que controla al signo de Capricornio es la letra Ayin, que literalmente significa “ojo”. El mes lunar es llamado Tevet, que proviene de la palabra tov o “bueno”. Los kabbalistas enseñan que, en efecto, el mes de Tevet es un tiempo para cancelar o anular el “mal de ojo”. Ayin más tov literalmente significa “buen ojo”, que es la fuente de todas las bendiciones. Este mes comienza con observar las velas de Janucá; ¡consiste en el poder de los ojos!
"Podemos dar un salto de fe".
Si pensamos en ello, cada proceso destructivo comienza con alguna especie de mal de ojo, juicio que se emite a través de los ojos. Todas las formas de ira y destrucción se originan en ese lugar. El ojo observa, el cerebro juzga y prosiguen las acciones. En el cuerpo, el órgano relacionado con la ira es el hígado (una víscera) y no casual; desde tiempos antiguos a los iracundos se les ha llamado “viscerales”.
Cuando estudiamos minuciosamente al signo de Capricornio, es común descubrir que aquellos nacidos bajo su influencia perciben muchas cosas como difíciles y hasta como negativas. El filtro a través del que observan el mundo es complicado, ¡así que el antídoto es el comportamiento opuesto! Asimismo, los kabbalistas enseñan que a los diez años, los niños “saltan como cabras”. En arameo, cabra es gadí; literalmente “Capricornio”. Saltar de arriba abajo “como cabra” es una etapa importante del proceso de crecimiento. El mes de Tevet siempre se relaciona con el proceso de crecimiento saturniano, pasar de la inmadurez a la madurez. El “mal de ojo” en realidad es una respuesta muy inmadura.
En resumen, el mes de Tevet representa una oportunidad increíble para observar a todas las personas y todas las cosas con una mirada positiva y buena, para así cancelar todos los juicios potenciales en nuestra vida.
¿Cómo se refleja eso en la carta de este mes? Pues, cinco planetas están alineados en el pesado Capricornio. Gracias a Dios, los planetas pesados y densos en Capricornio están rodeados en la carta por Venus que ya está en Acuario y Mercurio que sigue en Sagitario.
Júpiter y el Sol están en conjunción, y la mayoría de los planetas están en la quinta casa, también regida por el Sol. Qué maravillosa oportunidad para desarrollarnos y expandir nuestros horizontes. Además, el rebelde Urano está en el Medio Cielo de la carta y formando un ángulo con Júpiter y la Luna, lo cual nos ofrece una oportunidad maravillosa para salir de nuestro marco y trascender nuestras limitaciones. Veámoslo como un cambio de visión para que sea de largo alcance, en vez de corto alcance. Júpiter ya entró en Capricornio, todos los asuntos de fe, certeza y espiritualidad son fortalecidos, y esto será una tendencia para todo el año 2020.
Así que el plan de este mes es primero estar conscientes de nuestra visión “estrecha” y nuestro “ojo no tan bueno”. Entonces, con Júpiter de nuestro lado, podemos dar un salto de fe y permitir que el cosmos irradie bendiciones sobre toda la humanidad.
¡Les deseo a todos un nuevo mes maravilloso!