En la porción del Zóhar de Nasó, Moshé le dice a Rav Shimón que tenemos la capacidad de eliminar el caos de nuestra vida a través del Zóhar, mediante su sabiduría y secretos, y al leerlo y escanearlo.
Rav Shimón explica, con relación al Zóhar, que el caos desaparece cuando enciendes la Luz; cuando la Luz hace sentir su presencia en cualquier condición, la oscuridad —también conocida como caos— debe desaparecer y en efecto lo hará. Pero no nos referimos a la luz física, la luz eléctrica o la luz de una vela. Nos referimos a la Fuerza de Luz de Dios.
"Tenemos la capacidad de eliminar el caos de nuestra vida".
Dentro de la porción bíblica de Nasó está todo lo que se lee en cada uno de los ocho días de la festividad espiritual de Janucá, la cual se conoce como el Festival de las Luces. Pero contraria a la creencia popular, Janucá no consiste en encender velas, encender aceite y tampoco en la victoria. Esto no es lo que los kabbalistas querían que fuera la tradición miles de años después. En lugar de ello, a lo que ellos se referían es a una condición en la cual la Fuerza de Luz de Dios hace sentir su presencia.
Aun si hacemos un intento de conectarnos con la Fuerza de Luz de Dios todos los días de la semana, lo que en realidad hacemos la mayoría de nosotros es prevenir los efectos de la oscuridad y disminuir la brutalidad del caos. Sin embargo, la Fuerza de Luz de Dios no está presente cada día y no hay posibilidad de eliminar el caos durante la semana. Está escrito en Génesis: “Fue la noche y fue la mañana”. ¿Qué significa esto?
"Coloca tu mano sobre el Zóhar".
El Zóhar nos dice que el significado de este versículo es que cada día es una prueba; que podemos eliminar los efectos de la oscuridad sobre nuestra vida personal, pero no podemos deshacernos de la oscuridad. La fuerza esencial que crea el caos en nuestra vida seguirá presente durante la semana, y solo en Shabat y las festividades espirituales tenemos la oportunidad de conectarnos con la Fuerza de Luz de Dios sin ninguna añadidura de oscuridad. En estos días, cuando empleamos las cavanot o meditaciones adecuadas, podemos obtener el poder para eliminar el aspecto de oscuridad que puede llegar a nosotros en cualquier momento dado.
Necesitamos veintitrés volúmenes del Zóhar debido a la falta de dignidad humana. Indiferentemente de si estás de acuerdo o no con una persona, o si esa persona te lastima sin ninguna razón, no hay justificación para tratar a alguien sin dignidad humana. Ofrecer dignidad humana no significa que no debas confrontar; sin embargo, no puedes abusar de la gente y hacerla sufrir.
Cada vez que nos tratamos unos a otros sin dignidad humana, perdemos nuestra capacidad de alcanzar la inmortalidad. No obstante, Dios, en Su sabiduría, nos dio muchas oportunidades en el año para restaurar la inmortalidad en el mundo. El Zóhar, el libro físico, expresa este poder.
No esperes a estar pasando por una aflicción o un momento duro; coloca tu mano sobre el Zóhar. Quizá te tome veinte minutos, pero sin lugar a duda, a nivel físico, sentirás literalmente el poder del Zóhar.