Fecha de publicación:
Noviembre 16, 2014
Fecha de grabación:
Noviembre 17, 2003
El mundo estaba en una encrucijada. Las líneas existentes entre la ciencia, filosofía y misticismo estaban borrosas. Mentes brillantes incursionaban libremente entre estas tres disciplinas. A diferencia del punto de vista de los científicos contemporáneos, ciencia y misticismo no se contraponían, bajo la comprensión de lo que verdaderamente era: ¡dos mitades de un todo!
Sin embargo, la acción histórica de Rav Avraham Azulai, plantó la semilla para la difusión de la Kabbalah a las personas. La semilla sólo tendría que esperar un poco más antes de poder germinar.
Cuando un sabio kabbalista deja el mundo, una ventana de apoyo y conexión con toda la energía que ha revelado durante su vida se pone a nuestra disposición, particularmente a través del estudio o la visita a su tumba. Un momento especialmente poderoso para conectarse con el apoyo de los justos es en su Hilulá, el día en que partieron de nuestro mundo físico. Hilulá significa literalmente un día de celebración y al quedarnos despiertos hasta altas horas de la noche, a veces hasta el amanecer, estudiando sobre sus vidas y la sabiduría que revelaron, podemos acceder a su energía y asistencia para transformar nuestras propias vidas.