Chagai Shouster encontró la Kabbalah en el monte Everest, o mejor dicho, la Kabbalah lo encontró a él.
Chagai soñaba con ir al monte Everest y cuando llegó allí, luego de dejar el ejército israelí en 1995, su vida cambió para siempre. Ahí conoció a un estudiante del Centro y le tomó el gusto a la Kabbalah por primera vez. Inmediatamente fue atraído por la manera simple y clara que tiene la Kabbalah de entender la vida.
Cuando regresó a Tel Aviv, se inscribió en el curso Kabbalah 1 y, desde entonces, ha pasado cada momento de su vida dedicado a llevar al mundo la visión del Rav y Karen sobre la dignidad humana, la unidad y cómo remover el dolor y sufrimiento.
Chagai ha sido maestro del Centro por casi 15 años, desde un lugar a otro del planeta, en lugares como Tel Aviv, Londres, Boston, Las Vegas, Orange County en California y ahora en Nueva York y Florida. Ha jugado un rol preponderante en la misión del Centro, a través de diseminar las enseñanzas de la Kabbalah, inclusive hasta Estambul, donde dió inicio al primer grupo de estudio del Centro de Kabbalah en Turquía.
Sus enseñanzas están llenas de esa simplicidad de la sabiduría kabbalística y es particularmente talentoso en ayudar a otros a hacer simple lo que parece complicado. “Cada problema tiene una solución simple” -dice- y su meta es compartir las herramientas espirituales necesarias para encontrar esas soluciones. Por eso no es sorpresa que ame enseñar Kabbalah 1 y 2.
Usando personalmente la sabiduría de la Kabbalah, ha aprendido cómo cambiar y ser una mejor persona. Comparte con sus estudiantes las herramientas necesarias para el proceso de transformación, ayudándoles a remover su negatividad para ser mejores personas, mejores canales de luz y a vivir la vida destinada -una vida de plenitud infinita.