Cada uno cuenta con el poder de cambiar lo incambiable, de acceder a otras realidades. Todo se trata de ejercer nuestro libre albedrío. Esta semana recibimos una inmunización que nos ayuda a fortalecer nuestro libre albedrío: la habilidad de tomar decisiones de manera proactiva, desde nuestra alma y con base en lo que es lo mejor para nosotros a largo plazo. Si nos fortalecemos para ver estas decisiones en el momento y si decidimos en lugar de reaccionar impulsivamente, podemos cambiar nuestro destino.